Muy lograda esa acuarela, muy japonesa, y los versos también. He de confesar mi ignorancia sobre la música japonesa, sin embargo estoy convencida de que la identificaría enseguida. Todo lo oriental es tan distinto, tan mágico, tan identificable. Me gusta. Un abrazo de sol naciente. (Y voy a buscar música japonesa en la red)
Tremendo, Sergio. Rendida a tus pies, quedo con este poema. Bellísimo. Lo leo y releo en voz alta y te imagino con los ojos rasgaditos de japonés. Qué lindo. Me encantó esta música. Me sonó diáfana y con buen ritmo. Aguda para mi tesitura y tal vez por eso encantadora. Eres un genio. La acuarela, tú sabrás por qué, me resulta triste en su belleza. Abrazos mandarinos.
Sergio, se adivina le tersura de la piel a pesar del kimono de seda de tonos pasteles. Se presiente el vibrante tono ascendente de los ritmos de taiko invadiendo todo el espacio. Se saborea el sake en el ambiente.
Maribel, es de esas acuarelas de rara resolución, uno ataca y el color va surgiendo casi por casualidad. La música japonesa extraña para nuestros usos, a mi siempre me a dejado una sensación de sensualidad imperceptible, tal vez porque estamos acostumbrados a la sensualidad brusca. Espero que encuentres buena música.
Izaskun, a mi me paso algo similar, lo leía y releía y encontraba tesituras extrañas y dude mucho en dejar la imagen poética como una instantánea, fugaz e insinuante. La acuarela, como le comentaba a Maribel, tengo la misma impresión, esta esa mujer como abandonada a su propio cuerpo, ensimismada, solitariamente a gusto.
Alicia, te comento que mi relación con el sake no ha sido afortunada las tres ocasiones que lo probé, solo conseguí dar unos cuantos sorbos, tal vez en otra oportunidad encuentre sus cualidades. El que me encanta es Basho. Música lejana e insinuante, es cierto.
Blanca, sigo la hebra, se me ocurrió buscar sonoridades y aquí andamos. Han sido pequeños poemas, intentare narraciones o diálogos, no lo sé, lo intentaré.
Muy lograda esa acuarela, muy japonesa, y los versos también. He de confesar mi ignorancia sobre la música japonesa, sin embargo estoy convencida de que la identificaría enseguida. Todo lo oriental es tan distinto, tan mágico, tan identificable. Me gusta.
ResponderBorrarUn abrazo de sol naciente.
(Y voy a buscar música japonesa en la red)
Tremendo, Sergio. Rendida a tus pies, quedo con este poema. Bellísimo. Lo leo y releo en voz alta y te imagino con los ojos rasgaditos de japonés. Qué lindo. Me encantó esta música. Me sonó diáfana y con buen ritmo. Aguda para mi tesitura y tal vez por eso encantadora.
ResponderBorrarEres un genio.
La acuarela, tú sabrás por qué, me resulta triste en su belleza.
Abrazos mandarinos.
Sergio, se adivina le tersura de la piel a pesar del kimono de seda de tonos pasteles. Se presiente el vibrante tono ascendente de los ritmos de taiko invadiendo todo el espacio. Se saborea el sake en el ambiente.
ResponderBorrarEsta música me ha sonado muy lejana.
Besarkadatxu bat
Encuentro un curioso contraste entre tus siempre alegres versos y esa acuarela un tanto oscura...
ResponderBorrarSaludos.
Me gusta esta nueva etapa, versos y pinturas de diferentes lugars del mundo.
ResponderBorrar¡Muy oriental el dibujo!
Besos!
Blanca
Maribel, es de esas acuarelas de rara resolución, uno ataca y el color va surgiendo casi por casualidad. La música japonesa extraña para nuestros usos, a mi siempre me a dejado una sensación de sensualidad imperceptible, tal vez porque estamos acostumbrados a la sensualidad brusca.
ResponderBorrarEspero que encuentres buena música.
Abrazo a media luna.
Sergio Astorga
Izaskun, a mi me paso algo similar, lo leía y releía y encontraba tesituras extrañas y dude mucho en dejar la imagen poética como una instantánea, fugaz e insinuante.
ResponderBorrarLa acuarela, como le comentaba a Maribel, tengo la misma impresión, esta esa mujer como abandonada a su propio cuerpo, ensimismada, solitariamente a gusto.
Un abrazo de cerezo.
Sergio Astorga
Alicia, te comento que mi relación con el sake no ha sido afortunada las tres ocasiones que lo probé, solo conseguí dar unos cuantos sorbos, tal vez en otra oportunidad encuentre sus cualidades. El que me encanta es Basho.
ResponderBorrarMúsica lejana e insinuante, es cierto.
Un abrazo en sedas.
Sergio Astorga
Lola Mariné, espera a que suba los dramáticos que tengo suficientes para llenar una ollita.
ResponderBorrarEn esta ocasión la acuarela se acomodó en el contraste.
El abrazo es alegre.
Sergio Astorga
Blanca, sigo la hebra, se me ocurrió buscar sonoridades y aquí andamos.
ResponderBorrarHan sido pequeños poemas, intentare narraciones o diálogos, no lo sé, lo intentaré.
Abrazos orientados al oriente.
Sergio Astorga