En los pianos caracoles de los acústicos silencios; una concha submarina se pierde en la corriente; y las mareas -volcanes románticos del ritmo- inspiran el submundo de la luna y olvidan su isla tras la ola. Sergio Astorga
Sergio, te diré que he sacado un bono para todas las funciones de música que nos has organizado.
Si la anterior sesión fue un verdadero disfrute de flamenco a la guitarra, creo que la partitura al piano de Bach que acabo de escuchar me ha transportado a un momento más sosegado.
Metamorfosis de notas al piano convertidas en olas cóncavas y convexas. Música armoniosa al vaivén del oleaje. Espectadores silenciosos gozando del magnífico concierto. El océano infinito erigido en anfiteatro de la obra. Por último como invitada de honor, como no podía ser menos, la gran dama en cuarto creciente, eterna dueña y señora del flujo de las mareas.
Sergio para continuar la espiral del caracol te comento que Bach era para Chillida un arquitecto que trabajaba con el sonido y el tiempo. El artista vasco lo reconoció como motor inspirador de su obra desde 1979 ¿Te das cuenta? En él unidas la arquitectura y la música. En ti la pintura y la literatura. Es muy curioso el mundo del arte y sus conexiones.
Gema, en esta hora el agua se contiene en el arpegio y en la quietud del invierno, los cuervos que aquí revuelan se empapan de vientos, mustios, y el cielo es blanco porque como dices le he quitado el agua.
Abrazos a través del vitrolero de de vidrio. Sergio Astorga
Izaskun, que ando buscando azul para vestirme, a ver si me adivinas. Algunas notas salvan las manos ansiosas, será por el pentagrama o el cronómetro que los verdes se cubren de blanco. La luna, a ratos, desprende mariposas para perfumar el sueño. Algunos a ello le llaman alma, otros vagancia.
Alicia, que has dado un paso adelante, como la lechuza, que sueña la caza aunque no la vea. Unas coplas de Machado me dicen al oído que uno sueña que soñaba y que todo pasa y todo queda pero lo nuestro es pasar. Pasemos. Bach no podía ausentarse y vendrá después, que ya tengo los versitos, pero me falta el dibujito, cosas del abarrote, que cuando hay cebo falta el anzuelo.
Alicia, que has hecho el concierto, como si de una fuente brotara esa gana que tienes que me gana. Como quisiera tener pulidas las manos para peinar los menguantes lunares. Tener alamares en los dedos y mármol en el seso.
La masa no ha sido mas ligera que en las formas de Chillida. Yo le profeso, a Eduardo una fascinación espacial, metódica y contrapunteada. No sabia de este culto por Bach, mas no me extraña, los dos llevan a la excelsitud sus respectivas variantes, Bach en la sonoridad y Chillida en el espacio, y digo espacio porque el interés escultórico estaba mas en su búsqueda de espacio que de forma o si se quiere, la forma es concebida como espacio.
Las interconexiones en el arte son naturales, al igual que en la ciencia, dime cuál es la diferencia entre la química y la física. Hay ciertas zonas que son difíciles de someter a bordes exactos.
Esta vez que sea un agradecido abrazo. Sergio Astorga
Maribel, un acueducto sonoro, enmarañado azul recuerdos de niño jugando a tocar el piano y sentir que las teclas corrían como agua por mis dedos. Una vida después de tantas vidas. Los sonidos habitan, baten.
Que belleza de piano y de poemas, recorro como siempre admirando y disfrutando de tus letras y los colores de tus pinceles. Un abrazo en do mayor con rumor de olas.
Es preciosa la vidriera que pintaste. Para contener ella sola todo el agua dentro. ;-)
ResponderBorrarUn besazo
¡'Que belleza! Sergio gracias por compartir tu arte, de verdad.Un abrazo enorme
ResponderBorrarNice composition and happy new Year !
ResponderBorrarQué belleza. Cuánta. Ando por debajo del piano sumergida. Intentaré asirme a la luna.
ResponderBorrarBesos caracoleados.
Sergio, te diré que he sacado un bono para todas las funciones de música que nos has organizado.
ResponderBorrarSi la anterior sesión fue un verdadero disfrute de flamenco a la guitarra, creo que la partitura al piano de Bach que acabo de escuchar me ha transportado a un momento más sosegado.
Metamorfosis de notas al piano convertidas en olas cóncavas y convexas. Música armoniosa al vaivén del oleaje. Espectadores silenciosos gozando del magnífico concierto. El océano infinito erigido en anfiteatro de la obra. Por último como invitada de honor, como no podía ser menos, la gran dama en cuarto creciente, eterna dueña y señora del flujo de las mareas.
Sergio para continuar la espiral del caracol te comento que Bach era para Chillida un arquitecto que trabajaba con el sonido y el tiempo. El artista vasco lo reconoció como motor inspirador de su obra desde 1979 ¿Te das cuenta? En él unidas la arquitectura y la música. En ti la pintura y la literatura. Es muy curioso el mundo del arte y sus conexiones.
Esta vez que sea un largo y sonado aplauso.
Gema, en esta hora el agua se contiene en el arpegio y en la quietud del invierno, los cuervos que aquí revuelan se empapan de vientos, mustios, y el cielo es blanco porque como dices le he quitado el agua.
ResponderBorrarAbrazos a través del vitrolero de de vidrio.
Sergio Astorga
Marisa, hay un pámpano turgente que se moja de escarcha y al alba, como si se enredara, se convierte en nodriza de la mañana.
ResponderBorrarAbrazo antes que llegue el agua.
Sergio Astorga
In third dimension I thank you.
ResponderBorrarEmbraces three.
Sergio Astorga
Izaskun, que ando buscando azul para vestirme, a ver si me adivinas. Algunas notas salvan las manos ansiosas, será por el pentagrama o el cronómetro que los verdes se cubren de blanco. La luna, a ratos, desprende mariposas para perfumar el sueño. Algunos a ello le llaman alma, otros vagancia.
ResponderBorrarAbrazos lunares.
Sergio Astorga
Alicia, que has dado un paso adelante, como la lechuza, que sueña la caza aunque no la vea.
ResponderBorrarUnas coplas de Machado me dicen al oído que uno sueña que soñaba y que todo pasa y todo queda pero lo nuestro es pasar. Pasemos.
Bach no podía ausentarse y vendrá después, que ya tengo los versitos, pero me falta el dibujito, cosas del abarrote, que cuando hay cebo falta el anzuelo.
Alicia, que has hecho el concierto, como si de una fuente brotara esa gana que tienes que me gana. Como quisiera tener pulidas las manos para peinar los menguantes lunares. Tener alamares en los dedos y mármol en el seso.
La masa no ha sido mas ligera que en las formas de Chillida. Yo le profeso, a Eduardo una fascinación espacial, metódica y contrapunteada. No sabia de este culto por Bach, mas no me extraña, los dos llevan a la excelsitud sus respectivas variantes, Bach en la sonoridad y Chillida en el espacio, y digo espacio porque el interés escultórico estaba mas en su búsqueda de espacio que de forma o si se quiere, la forma es concebida como espacio.
Las interconexiones en el arte son naturales, al igual que en la ciencia, dime cuál es la diferencia entre la química y la física. Hay ciertas zonas que son difíciles de someter a bordes exactos.
Esta vez que sea un agradecido abrazo.
Sergio Astorga
¡Qué maravilloso díptico, Sergio! Esta combinación musical y acuática es espectacular. En los pianos caracoles...
ResponderBorrarUn abrazo submarino (y sonoro).
Qué azul más acaracolado y musical. Una dicha, Sergio.
ResponderBorrar(Aún apegada a tus dibujos)
Abraxolotls
l.
Maribel, un acueducto sonoro, enmarañado azul recuerdos de niño jugando a tocar el piano y sentir que las teclas corrían como agua por mis dedos.
ResponderBorrarUna vida después de tantas vidas. Los sonidos habitan, baten.
Abrazo subacuatico armónico.
Sergio Astorga
Abol, la dicha se desgrana, sepulta los adioses y los manantiales apuran los rocíos y es de azul, será? la palabra.
ResponderBorrarAferrado a tus paredes.
Abrazcóatl
Sergio Astorga
Que belleza de piano y de poemas, recorro como siempre admirando y disfrutando de tus letras y los colores de tus pinceles.
ResponderBorrarUn abrazo en do mayor con rumor de olas.