Dicen que la plusvalía,
otros que fue pleitesía,
lo cierto es que sus huesos
embargados los tenían.
Por andar de algarabía
se les rompió la alcancía.
Dicen que fue por abril
cuando perdieron perfil.
Yace aquí la blogería
con su sonrisa bruñida,
nos dicen que con la vida
no vale la economía.
Tristeza de ruiseñores
cantan las glorias y hazañas
de los blogueros ufanos.
No metieron ni las manos.
Beso frío el de la muerte,
antojo que no se lleva:
confundir la fruta sana
con la piel de la guadaña.
¡Ay flores de cempasúchil!
¡Veladoras encendidas!
De morado es el huipil
de la red entristecida.
Sergio Astorga
Acuarela/papel 20 X 30 cm.
Que sepa usté que no es uno de mis antojos favoritos.
ResponderBorrarPero no por eso voy a dejarle sin un beso sentiíto y jondo.
A la de la guadaña que la den.
¡ qué bellas pinturas !
ResponderBorrary tu escrito FELICITACIONES!!!
cariños
Lo peor es para quienes nos hemos arruinado sin haber disfrutado de la jarana... La guadaña luego siega a todos por igual. Besos, querido amigo.
ResponderBorrarSergio, me alegra comprobar que no faltas a la cita anual del Día de Difuntos con esa calaverita, manifestación poética de la tradición popular de tu tierra. Esa manifestación de convivencia con la muerte valiéndose para ello de la muerte en sí misma. Esa que nos iguala y nos arrasa a todos por igual con su implacable guadaña.
ResponderBorrarLa imagen, una vez más, complementa todo el conjunto artístico.
Un abrazo de vida.
Hola Sergio, ví un preview de tu post hoy temprano y no me lo podía perder, me encantan las celebraciones del Día de los Muertos, he tenido la oportunidad de verlas en Los Angeles, a la usanza mexicana, no estoy segura si tendré tiempo de hacer un paseo hoy, qué lástima.... Hermosa acuarela y muy bellas palabras,
ResponderBorrarUn abrazo,
Myriam
¿Llego tarde a la fiesta? ¿Los muertos ya se pusieron a danzar?
ResponderBorrarMe pido una calaverita de azúcar y me apunto al baile.
Me alegra ver que la tradición de la tierra sigue viva.
Un abrazo mortal.
Mis queridas amigas no se me desesperen tuve que salir y está lloviendo a cantaros: sapos, culebras, gatos no.
ResponderBorrarLes comento cuando regrese.
Gracias y disculpe las molestias que esto le ocasiona.
Un abrazo rapidin. Así es el Abarrote.
Sergio Astorga
Mammamia, a los que nos gusta mover el esqueleto los fieles difuntos son un pretexto festivo. Hay memorias gratas y desventuradas, sin embargo, más vale un octosílabo rimado que un recuerdo encerado.
ResponderBorrarUn abrazo en dulce de leche (cajeta)
Sergio Astorga
Mammamia, a los que nos gusta mover el esqueleto los fieles difuntos son un pretexto festivo. Hay memorias gratas e desventuradas, sin embargo, más vale un octosílabo rimado que un recuerdo encerado.
ResponderBorrarUn abrazo en dulce de leche (cajeta)
Sergio Astorga
Isabel, para luego es tarde dijo el compadre Aureliano cuando veía a la Catrina dando cariñitos a sus amigos.
ResponderBorrarDisfrutemos de la jarana que luego noS tendremos que entender con la demacrada.
Abrazos bien terrenos.
Sergio Astorga
Alicia, la llamada de la Señora de las manos heladas no tiene manera de no ser atendida. Tradición y misterio, dos elementos inseparables de la existencia humana.
ResponderBorrarConjuntemos el saber y el jugar para sacarle brillo a la fortuna.
Un abrazo sin falta.
Sergio Astorga
Myrian, en el otro México que anda por los Estados Unidos se puede todavía apreciar el relajo (festividad) con la espiritualidad. Se ofrenda materia para honrar a las ánimas. Animas que animan el otro posible mundo de arquitectura imposible. Asistir a estas ceremonias es siempre nos revela y nos conmueve.
ResponderBorrarAbrazo danzante.
Sergio Astorga
Maribel, de ninguna manera todavía queda la de la trenza morada, el barrigón y el que no deja de darse golpes de pecho como queriendo entrar de nuevo a este mundo de los vivos. El baile sigue porque los invitados siguen llegando de mundos y submundos. Me encanta que traigas ya tu calavera de azúcar, porque ya solo quedan de chocolate ligth y la verdad, están muy insípidas.
ResponderBorrarLa tierra sigue girando, como que se nos atora, pero le damos un empellón y asunto arreglado.
Un abrazo a paso de baile.
Sergio Astorga.
Colorido y bien rimado este recuerdo de la mortalidad virtual y real, sirva para mantener lejos a la de la guadaña y cerca a los muy queridos blogueros.
ResponderBorrarUn abrazo muy vivo.
Excelente, excelente, excelente, Sergio.
ResponderBorrarMaría Eugenia, que no hay hora para la hora y nunca está a deshoras festejar esta mundanal y amigable boglería.
ResponderBorrarPor si las dudas nos quitamos las lagañas y nos tomamos un atole de guayaba.
Por los vivos un viva.
Abrazos de carne y hueso.
Sergio Astorga
Magda, una sonrisa bien amplia, como de sandía, para ti.
ResponderBorrarAbrazos blogeros.
Sergio Astorga
Hola :
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