viernes, 18 de diciembre de 2015

Entre bocado y bocado


A la hora del almuerzo los invitados imprevistos llegan con todo y plumas. Por fortuna, la dieta de la herida es más ácida que la saliva. 
A veces, un duelo de paciencia y de reinos se vive en las urbes. 

Fotografía: Jardim de João Chagas (Jardim da Cordoaria)Porto, Portugal

jueves, 17 de diciembre de 2015

Acopio


Se derramó como vino oscuro
y un repentino frío 
crepitó, pegajoso, en los labios.
El talento de la lengua
encierra un delirante grillo,
como si el barullo fuera el hogar
de los sabores.
De todos modos, 
el festín es una marca,
audible apenas,
cuando chocan las memorias.

miércoles, 16 de diciembre de 2015

Vestigio


El mapa de su frente
tuvo el talento de la fiebre.
Delirante, 
manchó la tarde
con la tierra amarilla de sus dedos.
Como una postal,
llegó tarde.
Hendidura de aliento.
Sin pudor,
la estampilla
es un eco entre dientes de su infancia.

martes, 15 de diciembre de 2015

Estación Poesía 5


Amigos: “Es hielo abrasador, es fuego helado”, nos dice Quevedo y en esas ando. Pongo, delante de sus ojos el hoy para el olvido de mañana, el poema que se ha publicado en el número de otoño en la Revista Estación Poesía 5.
Mi gratitud a su director Antonio Rivero Taravillo así como a su editores este bien otorgado. 
A los lectores su paciente y lucido mirar, pido.

Atajo

Se ataja con la mano la desnudez.
La serpiente original se descarna
y tu y yo, a cara limpia,
perfilamos la luz de la lámpara. 

En punto muerto nos deslizamos; 
equidistantes los murmullos.
Los rincones extraviados.
ondulan, sueltan su máscara.

El aire devora la placidez.
La brújula busca la misma rosa,
y la mano, extraviada,
se planta en extraño hemisferio.

En el fondo siempre comenzamos,
rutinarios, ensimismados.
Con el mismo rapto furioso
cuando la noche acecha de tan parda.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Los erguidos


Aquí, 
en lo más verde 
el tatuaje de sudor:
saliva fugitiva
del riñón inflamado.
Aquí, 
en medio de la luz neón:
el prolongado silencio tiene alba.
Cruzan las calles.
Ellos saben de la metralla 
y del rumor del miedo.
Son escombro de raíz
y mueca de guitarra.
Con la cabeza erguida,
llevan un sapiens  
como flor en la solapa.

sábado, 12 de diciembre de 2015

Parade


Los soldaditos de carne y hueso uno a uno fueron cayendo en la gran caldera del anonimato.
La marcha triunfal da testimonio.

Fotografía: detalle del monumento a D. Pedro IV, Praça da Libertade, Porto, Portugal.

viernes, 11 de diciembre de 2015

Celebración


Había nombres atados con hilo de ceniza.
Olores matinales.
Y una repetición de humo.
Con el calor,
las moscas
se pegaban al círculo,
al mismo ritual del sacrificio.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Del equilibrio


Lo más sorprendente era verla llevar cinco platos y tres vasos tambaleantes en los dos brazos. Usaba una charola pequeña, que no era lo normal en estos casos. De niña lo hacia con las muñecas y los peluches de su hermano. Todos pensaron que esos prodigios merecían mejor suerte. Asediada, comenzó a engreírse, hasta que no tuvo más remedio que entrar a la cadena de restaurantes para ganar mil quinientos al mes, más una comisión por si vendía dos mil pesos diarios. Se le veía ir y venir, confiada en su facilidad para mantener el equilibrio. Alguna vez tuve ocasión de mirarle a los ojos, así, muy de cerca, su mirada serena, como de abeja concentrada en el panal, le daba la seguridad del movimiento. Nunca la vi caer, ella balanceaba las caderas con un meneo entallado como si no supiera que llamaba la atención. Se llamaba Elizabeth. 
Un día al despertar, un hombre le susurró con fuerza en el oído, y sin abrir los ojos, Elizabeth, nunca más halló el equilibrio.

martes, 8 de diciembre de 2015

Casa del pescadpr


Encontrar pescado no es fácil. Zarpar de madrugada a lo indefinido. El aire es pesado como la mañana. La vida marina no aparece. Hay una tenue brisa y pareare que la buena ventura baja como marea.  A lo lejos veo llegar la barca de los pescadores. EL misterio en su mirada se sospecha. La soledad de agua es absoluta. Una súbita angustia me invade y me envuelve como esta neblina espesa como el futuro humor. Al llegar al puerto veo vacías las redes y las cubetas secas. Los pescadores encallados en su silencio derrotado, caminan rumbo a la posada para beber vino y pan. La casa del pescador los refugia y los sacia de las pérdidas marítimas. La seducción del mar queda adormecida, se llenan las copas de vino y la extensión mas humana se deja sentir en las bocas, bahías tranquilas que degluten el pan preparando el cordaje del mañana, para que literalmente, la quilla de su embarcación se lance de nueva cuenta a buscar ese escurridizo pez que los mantiene a bordo de esta rutina marítima.

Fotografía: Rua Vasco da Gama, 18 | Afurada, Vila Nova de Gaia 4400, Portugal

lunes, 7 de diciembre de 2015

El gallo y la jarra


Coqueto hasta su última pluma se encrespaba por cualquier motivo, ya porque el gallinero no estuviese lo suficientemente aireado o las semillas estuvieran regadas por todo el piso. Sin embargo, no era motivo para enfriar esos ojitos soñadores  que iluminaban el amanecer gallináceo hasta el delirio. Su canto alumbraba, no cabía duda. 
Su rutina cantadora parecía no dejar espacio para la contrariedad hasta que una jarra pizpireta atrajo las miradas del vecindario.

- Dame de tu agua - reclamó el gallo.
- Con esas maneras ni lo pienses - respondió la jarra alargando su cuello.
- Aquí el que indica las maneras soy yo. Que por eso me llaman el gallo de la pasión.
- Pues agua no te daré - sentenció la jarra.

Alborotado el gallinero, se llenaba el buche de piedritas. Esas puntadas de faisán les causaban sorpresa. Porque hubo un tiempo, cuando los faisanes dominaban el mundo conocido, el gusto lo marcaba la faisanada.
La lucha duró varios meses; ni el gallo ni la jarra concedieron un poco en su arrogancia. El día comenzó a retardarse porque el gallo dejó de cantar y las lenguas comenzaron a secarse a falta de agua. Se formó una comisión con las gallinas más expertas en interpretar el lenguaje no verbal.
Con explosivas refutaciones se llegó a la conclusión de darles un día conmemorativo para cada uno. Así, en los primeros días de diciembre se celebra la fiesta del gallo y en los primeros días de enero la jarra celebra su fiesta.

- Mi fiesta el la mejor - presumía el gallo. Festeja el final de un año emplumado.
- Mientes, la mía es la mejor, celebra el inicio de la esperanza y todos saben que la esperanza tiene sed - jactanciosa la jarra se mojaba los labios.

Se volvió a reunir una comisión, ahora experta en efemérides. Como había pocas expertas gallinas en la comunidad, se abrió una convocatoria internacional que recibirá registros hasta el 2 de febrero, día de la Candelaria. Si usted esta interesado puede registrarse en el kilómetro 17 de la carretera IC 45. Favor de llevar agua suficiente. No se aceptan radios ni iPods.

domingo, 6 de diciembre de 2015

También en domingo


No es lo que sabes. 
Ni la reunión
del cuerpo con el fuego. 
Es esa presencia que construyo 
antes de que el sueño 
caliente las ojeras. 
Es, cómo decirlo,
la costumbre de recrear 
tu voz en pensamiento.
¿Te parece poco?

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Calendario 2016: Un acuerdo en La


Como todos los años, por estas fechas, El Abarrote se complace en presentar el Calendario 2016 dedicado como ustedes pueden apreciar, a la música. Impreso a color en papel de 160 gramos, libre de ácidos, en tamaño carta o A4 como gusten denominar el formato. Consta de una portada y doce hojas con el respectivo numeral mensual. Lo tenemos en español y portugués.
Usted puede colgar (pendurar) todo o cada hoja del calendario según su gusto.
Si usted esta interesado puede enviarme un mensaje y con gusto le enviaremos su Calendario 2016 “Un acuerdo en La” a la comodidad de su hogar. El precio es el mismo del año pasado.
No se demore con la canasta de los cacahuates, que todos queremos romper la piñata, así que antes de tan festiva ación, lleve “Un Acuerdo en La”
Uno por uno. No se me amontonen.
Recuerden: no tenemos sucursales. Atención personalizada por nuestro gerente de ventas, el afamado Sr. Rubalcaba.

Por su atención.
Futuras gracias.  

martes, 1 de diciembre de 2015

Diciembre


De qué esta hecho el diciembre sino de uva y castaña con su ancha anca de memorias. Es morena la pureza y atroz el sudoroso talle del olvido. Celebremos como si fuéramos invitados a esa ecuación de la copa y de la daga. Que todo vuelva a ser azul para que el jade verde sea profeta de la madre tierra.
Acabemos bien el año que el cansancio es para enero. 

lunes, 30 de noviembre de 2015

Mordedura de pescado


Solamente el ruido húmedo se hizo cuerpo. Cerca del mar ese ruido oscuro lo formó vacilante. De llamas mojadas repartía el sonido de la ola. Cuando la noche cayó, los planetas que habitan el derretido espanto soplaron el frío solitario, ese frío de furia.
Se llamaba Esteban. Su corazón de sombra se levantaba a la orilla del océano al crepitar de la primera campanada. Esteban, era hombre de ciudad pero toda su vida se consumió en las paredes de los acuarios. Por eso su espíritu es de agua rota. Como hombre único, sus pisadas no dejaron mas que agujeros donde los pesacaditos de colores se miran juguetones. Es verdad, aveces es cruel el tambaleo de la vida de un hombre. Sobre todo cuando las escamas lo atraviesan como un arpón perdido. Hablo de Esteban, la sombra que se llenó de arena y que ninguna alga lo rodeó. 
La yerba crece en el sur y nadie se da cuenta que el refugio de Esteban no es nada porque sus ojos hace mucho que se fueron en la mordedura de un pescado. Los picotazos del cielo son testigos y la lluvia que crece.

domingo, 29 de noviembre de 2015

A lo hecho techo


Como mariposa de fierro
el techo respira luz,
Para el letargo
no hay reflejo.
Para la voz 
el hueco del sonido.
Uno quiere quedarse a vivir 
entre los fierros.
Y soportar todo el peso 
con los hombros.
Al fin de cuentas
uno siempre busca amparo
cuando tiene domingo la mañana.

Fotografía: techo en el andén de la estación de São Bento, Porto Portugal

viernes, 27 de noviembre de 2015

Las manos que mecen la página


Ávida de letras, su epicentro estaba en el índice de la mano derecha. Su deseo incontenible no menguaba a pesar de que su búsqueda no tuviera éxito; por eso las ediciones agotadas eran su platillo más suculento, porque, para esas manos, la lectura es apetito. Incontenible y contradictorio apetito porque la gordura de su historia contrastaba con sus afilados dedos.
Un día, que se puede buscar en el almanaque de 1998, tenía un blanco de alegrías. Había encontrado el libro de hojas más finas y letras capitulares romanas mejor ornamentadas de que se tuviera memoria. Su amor se hizo visible. Todas las criaturas dormidas entre su palma salieron desbocadas. Una maraña sin sentido se anidó en sus uñas. Se disecaron las palabras y los signos ortográficos huyeron a los manuales de auto ayuda. Como llaga encendida las paginas vecinas arrancaban sus oraciones de raíz. Llegaban gritos afilados de los lomos de los libreros de jurisprudencia. En largas filas, los libros infantiles se refugiaban en ese eclipse oscuro de los libros para adultos. Por una hendidura, embriagados, los libros ilustrados sacaban sus paraguas de papel para defenderse de las tarascadas de los cocodrilos. Fue una noche de gemido y de insomnio semántico.
A la mañana siguiente, se pueden ver en el aparador, el colgante inerte cuerpo blanco de unas manos lectoras.

Fotografía: Montra (aparador) de la Livreria Poetría,  Rua das Oliveiras 70, Porto, Portugal

jueves, 26 de noviembre de 2015

La rebelión del guajlote


Picoteando por los campos celestes, el 26 de noviembre del año en que los trigales crecieron un metro más de lo normal, llegó, unos dicen que en una nave, otros que en una nube y los más escépticos afirman que fue en una mutación producido por el calentamiento global de los sartenes. El hecho es que ha provocado toda un revolución en el medio guajolotero.  Como nadie quiere ver en su mesa adefesio de tan mala naturaleza, los guajolotes en vísperas se han unido para buscar, a como de lugar, una mutación aunque sea casera.
Hasta el momento de cerrar la redacción nos ha llegado un comunicado que  dice al calce: guajolotes - los llamados turkeys- de otras latitudes se quieren unir al movimiento, “cansados de la violencia de genero a lo que son sometidos”, acusan.  

Los mantendremos informados.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

La vertical


La vertical se hunde en el fondo del la tierra para entretenerse en subir como su naturaleza lo demanda, lijándole al cielo su curvatura.

Fotografía: Fotografía: desde el Jardim João Chagas (mas conocido como Jardim da Cordoaria) Porto, Portugal

martes, 24 de noviembre de 2015

Aliño


Si el ajo nos contara lo que le cuesta integrarse a la ensalada, otro apetito nos afligía.

sábado, 21 de noviembre de 2015

Cosa juzgada


Todos saben que la maldad comenzó cuando el día se palpó la joroba. No fue de inmediato. Se fueron platicando, naciendo. Salió el bastón de las palabras con altibajos sonoros. En el vacío la cordura y desde el fondo, ese apego a usar la misma vestidura. 
La luz se filtra con esa fuerza de planeta. 
Mejor mañana encontramos la salida.