lunes, 7 de noviembre de 2022

Despertares

 

La mirada interior se interna en los picos de luz. Dos hombres que no se ven. Se encuentran. Uno dibuja al pastel invadido de concentración. Otro, llega a su encuentro. Sonríe con claridad y un río de miradas se juntan como un arpa que toca la melodía del entendimiento. El silencio roto en pedazos en medio de la habitación se petrifica. Ellos con el polvo de locura entre sus cráneos escuchan el relincho del relincho verde del agua que les corre por sus venas.

Los dos esculpidos en rostro de batalla se blindan taciturnos al chocar sus sonrisas.