miércoles, 29 de mayo de 2019

Las tres



Las tres tuvieron su gracia. La primera se dijo hermana de la segunda y la tercera se junto por simpatía a las otras dos. La segunda tuvo que aceptar su realidad y desde entonces a las tres se les vio juntas. Eran lindas. Dicen que eran virtuosas. Cantaban canciones infantiles. Infértiles. Asediadas. Comenzaron a encelarse entre ellas. Deveras que tuvieron gracia. No hubo remedio que las salvara. El veneno, en tres partes iguales, fue minando sus cuerpos.

Todos sabían que eran muy unidas por eso las lloramos sin culpa.

martes, 28 de mayo de 2019

Octogésima quinta Lección



El hito como el mito requieren de un encuadre panorámico.

Fotografía: Vista do Porto, Portugal.

sábado, 25 de mayo de 2019

Octogésima cuarta lección


La avidez de la gárgola león es una mueca irónica a ras de suelo.

Fotografía: Aveiro, Portugal.

viernes, 24 de mayo de 2019

Septuagésima columna



No Hay verdad que dure cien años ni columna que la soporte.

Fotografía: Alcazaba, Mérida, España.

jueves, 23 de mayo de 2019

miércoles, 22 de mayo de 2019

Sexagésima novena columna



Algunas columnas son el sustento de los signos. De sus formas en canal. De su sonora quietud.

Fotografía: Museu de Arqueologia D. Diego de Sousa. Braga, Portugal.

martes, 21 de mayo de 2019

El jardín de los números



En ese jardín de números que se cruzan en un arabesco infinito el tiempo crecía con la humedad. En este lugar legendario hay un provocador de números, que desconcierta cuando muy temprano alimenta las horas, les canta y como si fueran grillos las horas le responden con chillonas voces. Hace cien años, su abuelo comenzó con este hábito que se volvió oficio. Ya son casi tres mil horas reproducidas. Le llaman Maestro. Los días se han modificado tanto que los enamorados se agitan y se amontonan a la entrada del jardín, aún en invierno. El jardinero, sonríe, atiza sus números secretos y de los pliegues de algunos minutos, cristaliza los deseos de los amantes en un tiempo continuo, delicado e irrepetible.

lunes, 20 de mayo de 2019

Sexagésima octava columna



Algunas columnas florecen de puro estilo.

Fotografía: Museu Arte Nova de Aveiro, Portugal.

sábado, 18 de mayo de 2019

Octogésima tercera lección



La acumulación de capiteles merma la rectitud de los principios .

Fotografía: templo romano, Évora, Portugal.

jueves, 16 de mayo de 2019

Octogésima segunda lección



Cuando el león se asolea el templo aguarda.

Fotografía. Sé Catedral, Braga, Portugal.

martes, 14 de mayo de 2019

Octogésima primera lección



En la dualidad como en la puerta, se sale o se entra si se tiene la llave.

Fotografía: Alguna porta en Aveiro, Portugal.


viernes, 10 de mayo de 2019

Secreto a voces


Soy tan inseguro que las variantes, por mínimas que sean, me trastocan la natural posición bípeda.

jueves, 9 de mayo de 2019

Sexagésima séptima



La soledad de la columna soporta tiempo y friso para beneplácito de los refugiados.

Fotografía: Pelas Ruas de Aveiro, Portugal. 

martes, 7 de mayo de 2019

Cárdenos azares



Era la sombra proyectada en un islote lo que le apremia. De los redondeles, el torito con la luna de testigo salió buscando pastura, con ese salero que tiene su bravura rumiaba su heroico destino. Cuando miró su sombra proyectada la quiso torear embistiendo como gladiador apuesto. Su sombra le engañaba, templando y cargando la suerte. Lumbre y nobleza le corría del testuz al rabo.
Cuando lo miro me ligo a él, al tótem, al pozo de la magia sanguinaria de estar vivo, lidiando de puntillas en la danza, jugando con la penumbra como si fuera primer espada.
La suerte es callada aunque andemos muy mozos espiando a los toros que salen a proyectar su sombra.
Que así duele la cornada, me dice la cuadrilla. Y sin mirarme la ropa finjo que no me duele aunque la sombra se tiña de grana cuando clarea el día.

lunes, 6 de mayo de 2019

Sexagésima sexta Columna



Algunas salomónicas columnas sostienen corintias formas como si al romper el frontón una barroca sensación de altura nos libertara.

Fotografía: Sé Catedral de Aveiro, Portugal.

miércoles, 1 de mayo de 2019

Mayo



No lo digo de soslayo ni como lacayo, ha llegado mayo envuelto en el sayo. Tiene rostro de papagayo. 
Vamos a festejarlo antes del desmayo o que nos parta un rayo.
Lo subrayo.