miércoles, 17 de febrero de 2016

Encuentro modernista


Al subir la mirada tuve una sensación Nouveau. El viento, por momentos pasó como un arrebato exótico. Las ramas secas de los árboles parecían cabellos enredados y una asimetría voluptuosa quedó como fistol durante toda la mañana. Un cielo de cristal exaltaba el color opalino y por no perderme en la ornamentación, busqué inmediatamente una calle donde pudiera depositar mi perturbación en piedras del románico.

Fotografía: Pela Rua de Cedofeita, Porto, Portugal.