El mensaje se encierra en sí mismo. Está
vivo. Lanza afirmaciones que alguien atrapa. Un secreto a voces de líneas sobre
la piedra. No sé si el escriba tenga en cuenta la porosidad del muro y su color
y en base a ello escoja la tonalidad de los trazos. Palpable, la garganta del
signo no tiene pies o cabeza. La ciudad fluye entre sus paredes como en el
antiguo latido de la cueva donde una primera mano revivió la chispa de decir
para otro: estoy presente.
PURA MAGIA , UN CUENTO SIN FIN de Mari Carmen Azkona
-
El pasado día 19, de la mano de la Asociación Cómplices Literarios y
editado por la Asociación Parkinson Nervión Ibaizabal (ACAPK), se celebró
la present...
Hace 4 días.