viernes, 15 de febrero de 2013

En pareja



Sobre la cama se extiende el calor de tu vientre. Sube una  línea de sueño por tu rostro y el centelleo te tu amapola se apoya en los codos de la noche. La mirada te descubre de mañana con tu camisa que trasluce el día. Ilesa, nadas entre hogueras y los terrores de tu infancia caen densos en esa sombra que llevas detrás de la oreja. Te recorro como adivinanza y de súbito, se derrama mi voz por tus dedos. Dormir en ti, te lo he dicho, es morir un poco, es olvidarme de mi carne y convertirme en agua. Rápidamente me despierto cuando saltas de lengua a lengua y cifras escrituras que no comprendo. Así es tu follaje: aéreo, tan carnal, que la sangre a borbotones me desnuda. Tendido estoy entre las sabanas; parpadea enamorada toda la tierra. La garganta se calla por inútil y los racimos de dudas se rompen a pedazos. Es más humana la piel cuando se frota.

Ya no puedo dudar: la palidez de mis horas se entusiasman cuando viven en pareja.

Sergio Astorga 
Acuarela/papel 20 x 30 cm.