lunes, 9 de septiembre de 2019

Sirena abarrancada


Una playa sin mar la hizo encallar. Con la duda y el esternón pegado por el hambre, con el canto empañado en la vidriera de los acuarios. No exagero, la vi sin conmoverme, a las ocho, cuando el calamar ya dormía.


Fotografía: Escultura de arena, Sand City, Lagoa, Portugal.