martes, 24 de julio de 2012

Pilar del Río


Hoy con el río Tejo y sus aguas calmas, en el antiguo barrio de Alfama, en el corazón de Lisboa este abarrotero visitó la Casa de los Bicos donde se encuentra la Fundación José Saramago. Casa de una voz que retumba todavía en mis oídos y en los ecos del mundo. Manantial de presencias donde la quietud es danza.
Devorado por el ansia y con ese invisible follaje de la duda buscaba encontrar a Pilar del Río, directora de la Fundación y poseedora de todos los anchos recuerdos de una vida con Saramago. Hormiguero de formas y de entusiasmos difusos al escuchar su voz. El presente esta lleno de oquedades y antes de que fuera depositado en otro torbellino me encontré de frente con un ser fino, sonriente, amoroso, sin mostrar las espinas de la ausencia y con esa generosa humanidad de la inteligencia. Hay una Pilar que expande a un Saramago y un Río que lo empapa.

No pude evitar ofrecerle un Temporal con la esperanza de que algún verso pueda endulzarle sus murmullos.
Hay veces que nuestras aristas se modelan y tal vez el día de hoy pude ser mejor hombre, nunca lo sabré, pero hoy sentí que hay plenitud en la mirada de Pilar del Río.

Una sonaja se asoma por la nube.
Imagen tomada de Internet

8 comentarios:

Maribel Romero dijo...

Es muy emocionante, Sergio, muy emocionante. Hasta aquí me llega la mirada de Pilar del Río, y en ella veo a Saramago. Felicidades por conseguirlo.

Un abrazo alegre.

Sergio Astorga dijo...

Maribel que gusto tenerte por este abarrote.
Fue en verdad muy emocionante. La casa y su restauración quedo muy sabrosa. La casa es un palacete cuya portada colmada de volumen y ahora que ha quedado limpia brilla la piedra como diamante. La casa son tres pisos, muy blanca en su interior y se dejan ver las antiguas murallas dentro del edificio. En el primer nivel están colgados en la pared todos los libros publicados en diferentes traducciones, algunos documentos personales, pasaporte, credenciales de la escuela, carnet de identidad. Es muy revelador ver sus agendas, donde programaba los temas y episodios que trataría en sus novelas. Textos originales, manuscritos y a maquina de escribir (mecánica). Algunas fotografías de amigos escritores y videos de la entrega del premio nobel. Es pequeña la sala de exhibición. En un descanso para subir al segundo piso donde se encuentran las oficinas, están expuestos su secretaria o escritorio, su maquina de escribir, tal vez la primera, un diccionario y en una mesilla varias esculturas de dioses paganos distingo un dios mexicano una africano, un chino un tailandesa. En el tercer piso, subes por escaleras, no hay elevador, esta la librería y mesas de lectura. En el último piso hay un auditorio. Creo que gustaras el día que visites la fundación.
Pilar, como sabes es una mujer vitalísima y creo que la fundación va ha tener y tiene una vida muy intensa. Ella es un encanto, se detuvo unos instantes para conversar y de inmediato preguntar si me gustaba la otra casa de Saramago. Contó lo intenso que es el recuerdo que sienten las personas de Saramago a través de ella. La vi muy contenta y eso me llena de tranquilidad. También, como Saramago, tiene el ánimo para desasosegar.

Abrazo y gozo.

Maribel Romero dijo...

Gracias por los detalles, Sergio, me siento muy feliz por conocer esos espacios impregnados de Saramago.

En contra de otras esposas de otros grandes genios de la literatura (que siempre están bajo sospecha), Pilar del Río es una mujer que gusta.

Abrazo y buena noche.

Myriam B. Mahiques dijo...

Hola Sergio, qué suerte has tenido de poder visitar la casa dos Bicos, justamente yo tengo un post de la casa, pero lamentablemente son fotos de google. Si tenés fotos del interior, me encantaría verlas en tu post. Un abrazo,

Alicia Uriarte dijo...

Sergio, enhorabuena por la fortuna de conocer a Pilar del Río y de poder sentir de nuevo a Saramago por medio de la Fundación que cuida de su patrimonio literario e histórico. Seguro que descubriste algún detalle nuevo de uno de tus ídolos literarios.

Pilar del Río dijo que admiraba de su marido la coherencia que tenía. Que no había posibilidad de distinción entre la persona y el escritor. Era un hombre de una sola pieza y coherente de la mañana a la noche y de la noche al día. No es precioso que digan eso de alguien. Y no corta con ello, dice que toda su vida es una declaración de amor a Saramago. Realmente conociste a alguien que además de amar a su compañero le admirba y llegó a él admirando su obra para luego acabar amándole. Creo que ha sido un ejemplo de colaboración de dos personas muy grandes.

Gracias por comparti la experiencia.

Sergio Astorga dijo...

Myriam, disculpa los intermedios, ando organizando la O en la M para salir con la T.
Tenía mucha ganas, deseos de ir a la Fundación, las fotografías que tomé no son muy buenas pero voy a buscártelas.

Abrazos bicos que son picos porque eran diamantes.

Sergio Astorga dijo...

Alicia, lo has dicho con poder de convencimiento. Ha sido una pareja ejemplar, porque había libertad de conciencia y congruencia en el hacer.
La experiencia la seguiremos compartiendo.

Abrazos al amparo de un pilar

María Eugenia Mendoza dijo...

Hola Sergio:
Preciosa reseña de la visita a la Fundación y del encuentro con Pilar del Río. Debe ser extremadamente dolorosa la ausencia de alguien tan amado pero sin duda su presencia en ella, en los libros, en los espacios que habitaron juntos debe darle la fuerza e inteligencia para seguir el camino de la inmortalidad.
Un abrazo.