martes, 30 de enero de 2024

Vericueto


 

La victoria verdadera dicen, no conoce la paz. Con este lema Victor, cuerpo de serpiente, recorría mundo, su mundo. Su corazón verde era casi vegetal, su sueño era biológico y no tenía ese flaco falso cielo azul. La letra V, paciente, comenzó a tener confianza al mirarlo. Hicieron un trato: nunca pronunciarían la V con articulación labiodental, la pedantería los violentaba. Victor, poco a poco se convirtió en una sinuosidad parecida a la letra inicial de su nombre.

Pasarón los años y su lengua viperina creció tanto, que se refugió en una soledad victoriosa. Su corazón tiene ahora el símbolo de la victoria, infelizmente se enteró de que existe la Bomba V-1 (Vergeltungwaff 1) No consigue mudar de cuerpo. 

Un bello cuerpo querría, suspira vencido.

domingo, 28 de enero de 2024

Semejanzas

 


Las afinidades están en los huesos, en las pestañas anochecidas, en su fecha de nacimiento.

Su piel sin mácula les recorre, les cubre sus cuerpos. La verdad las une y son tan diferentes que es difícil entenderlas. Su madre les tejió bufandas con rayas de colores, todavía las conservan y enredan su cuello como si el recuerdo las conociera.

Yo las he mirado crecer, sin embargo, no reconstruyo su rostro, los he olvidado y sólo ese polvo del espejo en el que se miraban me despierta su presencia.

jueves, 25 de enero de 2024

El borrico

 


El borrico es lanudo con ojos negros salientes y oscuros. Le gustan las aceitunas curtidas. Nació como engaño, esperaban un perro. Necesitaban un perro para guiar al ganado. Desfalco, que así le llamaron, comenzó a rebuznar y el ganado con tan extraño llamado se reunió en el cercado con obediencia.

De noche lo llevaban al río para beber. Él suspiraba y levantaba la vista como si supiera que eso que brilla son llamadas estrellas. Una gran nostalgia se le quedó fija en sus ojos negros salientes y oscuros, desde entonces.

Embrutecido el ánimo, inepto ya para pastear el ganado, lo amarraron en la cerca del establo. Dos meses estuvo en pie, su último día, recostado, miró las estrellas con la esperanza que no fuera un engaño.

Se terminó las aceitunas justo a tiempo.

jueves, 18 de enero de 2024

La súplica del Centauro

 


Cuando niño me cansaba de jugar con los olivos. Tengo la costumbre de andar por las veredas mirando a la izquierda. Aveces encuentro novedades, algún malquerer, nunca pienso, lo mío no es pensar. Es poseer de soslayo a las ninfas que hay por los campos. Son flores que aspiro. Cuando llueve se me pierden los caminos y me voy a la cueva de mi primo Carito. Él y yo hemos cortado muchas flores. Ahora con la tala de los bosques por estúpidos que quieren levantar templos, tenemos el alma marchita.

Carito, partió hace tres meses. Yo me dirijo a ustedes para pedirles cobijo, si tienen un pequeño jardín, por poco metafísico que sea, me las puedo arreglar. Se jugar con la abstinencia. Vivo con poco, mi única riqueza es ver, no pensar. 

Espero su llamado. 

Tengo buen oído.

lunes, 15 de enero de 2024

Canto de perfil

 


La santa tierra no se cansa, las cabras siguen en la montaña y los zorros se esconden en la cueva. Te canto Pachamama para que los planetas no choquen entre ellos y los abuelos cuenten como les fue debajo de tu tierra.

El hambre tuya es de cosmos y este cansancio es por la falta del humo y alcohol. 

En las mañanas te invoco con el moco suelto.

El equilibrio es lo tuyo, y lo mío y lo de todos.

Te canto en voz baja para que escuches.

¿Me oyes?

domingo, 14 de enero de 2024

Ciudad en línea

 


Los pensamientos en la ciudad lineal construyen una tierra ingrávida. En sus suburbios dejarás el cuerpo. Aquí no hay barcos ni salidas en tren. El silencio se oye cuando caminas. No hay relieve, sólo el suspiro del tiempo que crece al andar. El espacio es limitado, las calle son largas como túneles del sueño. El sol poniente es nada. 

Eso disfrutarás cuando entres a esta ciudad delineada. 

Mi casa.

jueves, 11 de enero de 2024

La P como sinonimo de dilema

 


Él tiene una disposición a la resistencia. Su médula es la lógica de picar. Allí o allá se multiplican sin empacho sus correría por tierra plana o empinada. Por menos, dicen, Van Gogh se cortó una oreja y Gregorio Samsa, dejó de mirarse en los espejos.

 

Le dicen:

 

- Oye, Pathos, ven.

 

Él, usando todo su ethos contesta que es Pato no Pathos, aunque la H es muda el sentido cambia. Losé porque he picado de todo.

 

- Déjate de florituras y acércate que se nos antoja caldo.

 

- Ni creas que me torcerás el pescuezo. Prefiero el exilio.

 

Desde entonces vaguea, asoma el pico con terror. Con talante epicúreo, se contornea con su ethos aprendido reforzado por los malos ratos.

 

lunes, 8 de enero de 2024

Consuelo en Re

 


Quiso alimentar con su arco la melodía desalentada de los jazmines. Con extenso La, levantó la partitura de la madrugada y rodando por el suelo quedaron los cactos enfurecidos de su pequeño jardín. Quiso cepillar el sonido de las corcheas hasta dominar los silencios de blanca y trocar la resequedad de la casa. Su alma de pentagrama se enamoró del bajo de su sombra. 

Le tuvimos que hablar de otras musas, de otros diciembres y así dejar en los prados las notas como si fueran lóbulos.

A veces, como un lamento, tarareamos su figura.

lunes, 1 de enero de 2024

Enero 2024

 


En la percusión de la tarde hay un enero. Recuerdo la ingratitud del punto final, la equidistancia de los óxidos y las ganas de sonorizarme habitan el recuerdo de Bizancio y del coñac. 

La conga toca a lo lejos en el hermético foro de las baterías.