jueves, 27 de octubre de 2022

De boca en boca

 


Nadie se dará cuenta. Se aleja de la casa y sin querer el eco responde adulterado. Quietud donde hubo bulla, olvido donde hubo aparatosa luz de neón. ÉL piensa que es castigo el beso que no se dio. Jura que nunca la ceguera tendrá ojos de nuevo. Le preocupa el dolor de la boca del estómago. Se siente abandonado. Escuchar su respiración, su inflamante estado. Su tiempo se marca por gases y aunque el emético es exiguo, él lo intenta, febril con la panza aferrada al dolor que regresa otra vez. Tiene miedo de las noches encadenado al asiento. Su vieja ilusión ya es ensordecedora como el sonoro tambor que le sacude.