El Ángel sin nombre
Bruñido y de mármol vestido siempre tiene un nombre distinto. Atrevido y respetuoso vive en cualquier esquina. Apura de un sorbo el celo de los adolescentes. No usa ropa interior, y de vez en cuando reparte nombres en los bautizos.
Al salir el sol se confunde con los cuervos. Ten cuidado, te puede robar tu nombre.