martes, 3 de noviembre de 2009

Ofrenda para El Mundo de los Sueños


Para Pizarr

Se alumbran las mariposas
al pasar la media noche.
En BizKaia luces ambar
de muslos jóvenes sueñan.

En altamar los cabellos
duermen con la voz de bronce
de Chillida y Juaristi
se bebe su Vinogrado.

En su jardín mora el alma,
esa que se nos predió
cuando el gallo dio de picos
al alba como a la araña.

El yin como el yan se mojan
como pulpo en tinta negra,
y el enigmático jaiku
es un signo que se alegra.
Sergio Astorga




Tinta/papel 20 x 30 cm.

Ofrenda para Trianarts

Para Triana

Que los jazmines florecen
por los patios de Sevilla,
y los alamares blancos
del Guadalquivir regresan,
lo saben los mayorales
y las virgenes morenas.

Las golondrinas eternas
hacen nido en las ventanas,
y en la Maestranza, la danza
de la sangre derramada.
Lo saben los puros nardos
y las marismas moradas.

Que el calor de llama fina,
el olor de buena casa,
con en el balcón de naranjo
y el manto del limonero
se encuentran, todos sabemos,
en el albero de azucena
de Trianats de seda y oro.

No bastan ocho silabas,
pero no tengo guitarra
para cantar por soleares.
Aquí, a tu vera queda,
negra montera bordada.
Sergio Astorga

Tinta/ plumín 20 x 30 cm.

Ofrenda para Siempre con Historias

Para Izaskun Legarza

Se levanta con la espada
del drama. Siempre historias,
lagartos a cucharadas
camareros tenerifes.
Los palomos borrachos
dormitan junto al gotoso
curvas del aire disulven
las azoteas, los rostros:
páramos de sol enjuto.
Corcheas sonando rubias
como burbujas en fila.
Las cacerolas del miedo
derraman en la penumbra.
Por una hendidura helada,
todos lo días mulatas
palabras cantan. Sola
se bebe la madera y vomita
las barcas que llegan a su playa.
El octosílabo estalla
solo de pensar tu farra.
Sergio Astorga


tinta/plumín 20 x 30 cm

Ofrenda al Ojo Travieso


Para Lilian Elphick*
En el sur una pestaña,
ojo que ya tiene dueña
Amarilla flor del ñuño:
vigilia dura del sueño.

En la cabeza un rueño
para levantar el leño;
Luna que comprime el ceño:
lúbrico olor abajeño.

Felinos de otros barreños
con humores aguileños,
hunden colmillos pequeños,
será porque son cigueños.

La eñe tiene sentido
porque es de niña traviesa.
Da machincuepas ilesa.
De sus letras soy cautivo.
Sergio Astorga


*Lo siento la ñ me atrapo.
Tinta china y plumín de color. 20 x 30 cm