Mi estimable clientela, este abarrotero, que ha recibido varias músicas de viento en diferentes tonalidades (pitos, trompetas y trompetillas) a lo largo de su abarrotera y abarrotada vida, no puede dejar de compartir el motivo del ufano estado anímico en el que se encuentra.
El Ojo Travieso, de todos conocido, ha realizado una travesura que me tiene volando alto y que ya no sé como bajar, porque no encuentro los círculos concéntricos del eucalipto.
Los invito a leer Mimos Polyglottos de Lilian Elphick, donde la palabra hace nido.
Gracias Lilian, me has dejado como aquel verso de López Velarde: “me siento acolito del alcanfor, un poco pez espada y un poco San Isidro Labrador”
Sergio Astorga
Tnta/papel 20 x 30 cm.