No tengo lengua ni apetito,
sólo el fino olor del vello.
El cruce
el cauce
de un texto de agua en el cerebro.
Ni lengua ni apetito,
sólo un colmillo desgastado
en el sudor óxido
del tacto.
Del cuerpo
ni lengua ni apetito,
sólo los nudos de la imagen.
Sergio Astorga
2 comentarios:
Qué gran hallazgo, Sergio, gracias por darme la dirección.
Un beso
Chiki
Chiki no hay ausencia en la memoria, tus comentarios siguen palpitando entre las hojas.
Gracias por tener antojos.
Un abrazo.
Sergio Astorga
Publicar un comentario