jueves, 19 de junio de 2014

Severidad


Nunca se terminara el rugido. Decir nunca es una manera de hundir la garra.

Cerámica

1 comentario:

Alicia Uriarte dijo...

Sergio, nunca digas nunca jamás. Esperemos que el rugido se transforme pronto en susurro.

Un abrazo.