Si me quieres, será por escrito. Si me quieres, la sintaxis será noche y madrugada por la ventana abierta. La letra será como el calor del salvaje, como la mordida suspirada de las cosas.
Si me quieres, ha de ser de lado a lado. Tendrás que disfrutar del error. Leer a pausas y nunca encabritarte por lo no dicho.
Si me quieres, descubrirás lo no previsto, lo que todavía no es bruñido. La brisa parda mojará las alas quemadas por la resolana.
La escritura es de tinta morada y nunca sabremos si deja el azul por el bermellón.
Si me quieres, el oído se cansará de oír estas palabras y mi cuello dejará la mansa paz del solitario.