No fueron
creados. Se encontraron por esos caminos del azar cuando buscaban ser gárgolas.
Su presente superó su pasado y sólo tienen sentido porque buscan el futuro en
su nostalgia. Son la componenda de su presencia. Su contradicción la salvan por
lo que son: un riesgo de imaginación. De haber nacido en otro espacio tal
fuesen caballeros águilas, por eso el azar les dio su lugar en el universo,
aunque nunca sabrán cuál es ese lugar. Son dos pero, piensan como uno, y eso
les suministra cierta ventaja ante la diversidad. Nunca envejecen porque se
renuevan en cada utopía.
En el siglo
XIX la hulla ennegreció su carácter, desde entonces todos los años bisiestos se
bañan en las aguas del caribe. Han mejorado lo suficiente para dejarse ver sin amarguras,
y tienen urgencia de articular sus primeras palabras para crear su paraíso.
Sergio
Astorga
Tinta/papel 20 x 30 cm.
4 comentarios:
"Nunca envejecen porque se renuevan en cada utopía", genial esa frase. Hermosos, texto y dibujo.
Un abrazo.
Sara, esto mellizos son una verdadera aparición. Si los encuentras puedes llevarte un aroma fino, como de alcanfor y canela.
Abrazos utópicos.
Son producto de un azaroso encuentro y un riesgo de imaginación. Y, aunque no han articulado sus primeras palabras para crear su paraíso, creo que las líneas dibujadas y escritas les han abierto ya las puertas.
Un abrazo con nostalgia futura, querido Sergio.
María Eugenia, es innegable, dicen los expertos del clima, que con la palabra se pueden crear paraísos. Las líneas le han dado presencia espacial y como bien dices ya se encuentran aptos para comenzar a poseer mundo.
Un abrazo fruto del presente que quiere colgarse de un futuro.
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