miércoles, 31 de diciembre de 2008
domingo, 28 de diciembre de 2008
Humedad
El niño se embarra la sal en los cachetes y mira perplejo la escalada del tlaconete, que buscará un refugio en el ladrillo,
para esperar la lluvia que lo anime, como un bosquejo lunar.
En su liquidez parsimoniosa arquea su molusca forma, dejando a cada pausa, una sensación plácida y bienhechora.
El ladrillo untado de manchas rojizas y verdes desparrama humores cancerosos que se distorsionan al calor y a la penumbra. Las florecillas acotan la espesura en una frialdad que se huele, que se palpa, como terrón desmenuzado en la nariz. El olor a yerba se confunde con las palpitaciones de la marcha. La luz acaricia la baba que deja el tlaconete dejando destellos en la huella lastimosa y dolorida. Esos destellos se filtran por las antenas del tlaconete hasta percibir el lamento que campea con el himno de una voz, que se arremolina en el arrastre.
Cavilando, el tlaconete deja llegar el sueño a su blandura y calado por el frío, bosteza entre el musgo y el ladrillo.
Sergio Astorga
jueves, 25 de diciembre de 2008
Chiste irónico
testaruda
obstinada
sola.
El café se derrama
infecundo
cohibido
torpe.
El ojo se pasma
inmóvil
descortés
fiero.
No se cual tristeza
es mas honda:
la que dejé
o la que llega.
miércoles, 24 de diciembre de 2008
Navidad
domingo, 21 de diciembre de 2008
Amar a tiempo
Era la era arqueozoica, hace 3 000 millones de años; aparecieron las primeras células, intimas, tímidas, elementales, no había conciencia, ni memoria del instante.
Hace 1 000 millones de años aparecen células complejas. La vida avanza lentamente. La era protozoica jugaba en nuestro planeta - no sabíamos que iba a ser nuestro (el planeta)- y con variedad inaudita hace 600 millones de años aparecieron los primeros organismos unicelulares (todos invertebrados).
Entonces los océanos, como en el que te miro, se pueblan de primitivos peces ya con vértebras. El Celacanto ya nadaba callado entre las profundas aguas verde azules.
Llegó inevitable la era Paleozoica hace 400 millones y después de 50 millones de años de prueba, los vertebrados salen del océano y se transforman en anfibios, un poco sueño y un poco vigilia, así como mi deseo por tu persona, Paquita de mi actualidad.
Había un sólo continente: la Pangea reina en el orbe; no existe España, ni China, sólo plantas y clorofila; procesos físicos y químicos y un poco de olvido entre la tierra y un silencio de pájaros al vuelo.
A caballo entre los tiempos hace 300 millones de años los reptiles aparecen y se adueñan del planeta, desde entonces, la sangre es fría y algún resquicio en mis venas se ha quedado. Los insectos reinan ufanos, multicolores, poliformes y los dinosaurios se contagian de grandeza.
Llega con fanfarrias hace 200 millones de años la era Mesozoica con los mamíferos a cuestas, pequeños, insignificantes, casi ratones astutos y asustados. Las plantas empiezan a dar flores y los sauros empiezan a ser guapos con sus sauras y les envían perfumados regalos.
Hace 65 millones de años del cielo llegó la desgracia y los saurios quedaron como testigos fosilizados y las aves y mamíferos tuvieron tiempo de sentirse dueños de un espacio.
En la era Cenozoica llegó el que me dio posterior nombre, hace 100 000 años, ahora soy mamífero, carnívoro vertebrado, bípedo y enamorado. Disculpa si me tardé, pasaron algunos años para poder encontrarte y no pienso separarme de ti hasta la próxima glaciación.
Por las eras y millones de años que me anteceden déjame decirte que te amo.
PDT. Por un cósmico momento a tu lado vale la pena tantas eras.
viernes, 19 de diciembre de 2008
Le doy mi palabra
Al entrar me quité el impermeable y lo arrojé al sillón, nunca me comporto así, eso de llegar y aventar la ropa es, como decirle, de mal gusto, un mal hábito, pero ese día lo hice y mire que por algo pasan las cosas, del bolsillo del impermeable cayeron unas hojas blancas escritas en letra bold de 12 puntos, Helvética, fue entonces que me di cuenta que el impermeable no era el mío, yo escribo en Futura Light, escribir en tipos helvéticos, ni soñando. Doña Angustias, ¿le puedo decir así? Lo digo en un afán de respeto, no piense que es por edad, los textos no tienen edad real solo literaria. Doña Angustias, leí lo que estaba escrito, no lo pude evitar, espero que comprenda, nunca pensé que ese texto tuviera una dirección real y que me permitiera escribirle esta carta. Lo leí sentado en este sillón en donde ahora le escribo, es un sillón muy confortable, usted se lo puede imaginar y luego confrontar, si es que algún día quiere visitarme, hay veces es mejor contar sin decir. Me parece que usted usa la segunda persona y eso le da la ventaja de que puede ser alguien que esta dentro o está fuera, puede ser un narrador que conoce o es un monólogo interior, evita usted al narrador omnisciente, que todo lo sabe y todo lo ignora. A veces contar una historia no es solucionar los conflictos, me decía mi abuela, no era propiamente mi abuela, pero como estaba sola y sin hijos decirle abuela era como justificar su vejes, ella lo sabia y le gustaba. Ella aborrecía las historias lineales me decía que los malos libros y las malas vidas don lineales, ponía de ejemplo a mi sobrina Adriana, ella si es mi sobrina verdadera, es hija de mi hermano Fredo y tiene pelo oscuro, disculpe, estoy cayendo en el mismo error, estoy contando datos que no interesan, en fin Adriana estuvo a punto de matar a su marido con un cuchillo de cocina, todos pensaron que era por que su marido la engañaba y sin embargo fue un misterio, ella sólo sabia que tuvo un acto de rabia que la marco toda su vida y esa era su historia. Un hecho que si se explica, muere. A veces el cómo es mejor que el porqué. Los lugares comunes, decía también mi abuela, son mi condena, porque estoy vieja piensan que soy amorosa y llena de nietos y soy amarga, no gusto de los niños y no tengo el cabello blanco porque me lo pinto de castaño. Espero que no le molesten mis palabras y que el texto que escribió, porque usted lo escribió, ¿verdad?. O es usted profesora de literatura y es una tarea de la escuela de uno de sus alumnos o tal vez ese texto es de su vecino y usted indiscretamente leyó. Espero que el impermeable que esta todavía en éste sillón sea suyo y si no lo es, entonces el texto tampoco es de su autoría; en verdad ya estoy confuso. De cualquier manera si usted no se llama Angustias yo ya tengo sus síntomas. Voy a enviar el impermeable, su texto (espero) y esta carta a la dirección que viene apuntada. Si no es usted quién pienso que es, le doy mi palabra que fue muy grato platicar con usted y no pierdo la ilusión de que me conteste. Palabra que si.
El impermeable
Por razones obvias no doy mi nombre.
miércoles, 17 de diciembre de 2008
Horizonte
sin mas tibieza
se reclinará a beber
y de su almohada nacerán
los paseos y la borrasca.
Desmayará al oído del quelonio
y engrosará
la cúpula de su paciencia,
calentado las patas
hiladas del cangrejo,
para morir en el lamento
del pelícano.
Como bálsamo,
la ola peinará sus comisuras,
y prendida como arete,
la caracola parirá murmullos.
El delfín retoza
en la corriente,
avisando que en el juego,
la lucha es apacible.
El coral de rosa reflejará
las palpitaciones de la medusa,
y encallará toda blasfemia marinera.
La tarde dejará la llama
que arde en sus arenas,
y volverá la calma,
al ver al horizonte resguardado.
Sergio Astorga
lunes, 15 de diciembre de 2008
Proyección
te puede no gustar lo que ves.
La luna me alumbra,
el sol me quema.
De perfil se afianza
alguna melancolía.
Estoy peinado,
cierra los ojos,
duerme, sueña
que el espejo
calle la imagen
de lo que pienso.
domingo, 14 de diciembre de 2008
POSADA
Horizontes inflamados
de jícamas estrelladas.
En la mandarina del día
enamorada la lima
se despide de su caña.
Un batallón de tejocotes
ruedan en señal de triunfo,
y de una carcajada pinta
se descuelga la piñata.
Que tu sed tenga posada
y tu árbol pictogramas,
y no pierdas el camino
cuando muerdas la guayaba.
Sergio Astorga
acuarela/tinta/papel
jueves, 11 de diciembre de 2008
Cuando...
desde la ventana de tu casa donde miro
se abrirán de nuevo flores
y un eco de mí quedará siempre.
el olor de mis actos
quedará impaciente
untado a tus quehaceres.
Cuando yo no esté porque regreso
tatuado de ti seré un grano
de sombra devorado y un poderoso
obelisco de abril o mayo.
Cuando el granito
tenga verdes cantos de gaviota,
un dulce brío
sentirás que te recorre,
y el ciclo de memorias
volverá a llenar
el camino de mar que nos separa.
Cuando ya no esté porque regreso
te seguiré llenando de palabras
y un poco de vida quedará
al través de la ventana.
martes, 9 de diciembre de 2008
El come Lunas
Al llegar al estanque, el corazón del sapo comienza su latido de agua; un montón de luciérnagas se marchan y el come lunas, con dos palomas como manos, abre la boca y su aliento de rama machacada, inunda de hechizos atmosféricos las diferentes fases de la luna.
Cuando veas una senda de alfalfa en la cintura de los cielos y diagramas de plata en tus papeles, recuerda que el come lunas esta inflamando sus pulmones.
Sergio Astorga
viernes, 5 de diciembre de 2008
Tres Pistas Tres
miércoles, 3 de diciembre de 2008
¿Será?
humores imbatibles.
Una plenitud desoladora,
un pájaro nutrido en festivales;
un sol mal colgado
por el cielo,
una sorda ambigüedad de agua.
Lecciones de cristal
bajo helada luz
al abrazo del otoño.
Paz y heno:
flama que encuentra parafina.
Se escucha la armonía
de las esferas,
molienda de formas
en los negros indefensos,
y en este pecho
y ombligo de arena
alguien me ama
o me derrumba.
lunes, 1 de diciembre de 2008
sábado, 29 de noviembre de 2008
Los nombres que vibraron
rompió el penacho verde
de la espera
y tocó la puerta el mar azul.
Así aprendía a leer.
¿Qué sería de mi sin la espada
enredada en junio, lo sabes?
Toda casa tiene
un guerrero protector
y un reloj colgado
y un canto que olvidar,
por eso hoy te escribo.
Aviento la red de mañana
para atrapar al pez dorado,
si te asomas,
si te asombras,
lo verás cabalgando.
Es cosa hecha
el suspiro que conversa
y la gana de decir:
que tengas la espera sabrosa
y el calor amado del día,
y el oro
y la plata
y el sueño ligero,
siempre ligero.
Déjame los tiempos quemados,
las llamas viejas,
el sonido vacío
de los nombres que vibraron.
miércoles, 26 de noviembre de 2008
Premio al esfuerzo personal 2008
En ese uso de libertad se me antoja conceder el premio a los siguientes Blogs:
5.Ocurrió en Febrero de Maribel Romero Soler porque soñaba con los azules como si fueran recuerdos.
6. El Alféizar de Juanan Urkijo porque afianzado en el misterio divaga solitario, combinando los contrarios, y del silencio es propietario.
7. Fuego con Nieve de Antonio Rivera Taravillo porque el fuego de la palabra se traduce en agua nieve.
Sergio Astorga
lunes, 24 de noviembre de 2008
Retrato de Familia
Podrás observar el parecido de la tía Pepa y del tío Vicente, así como la de mis primos "el pantera" y "el zopilote".
No puedo dejar de mencionar a mis tíos Don Baldomero, tan achacoso y mocoso, como sus hijos, y al tío Gabriel, siempre tan elegante cuando se trata de aparecer en sociedad.
Siento decirte que mis abuelos no están, fueron devorados antes de que yo naciera.
Con la certeza de que el semblante de mi familia te ayude a conocerme mejor te envío mi mejor rugido.
Sergio Astorga
viernes, 21 de noviembre de 2008
Entre-Vista
El agua y la culebra al fundirse en un abrazo curvo, proyectan dos cuerpos que en la hierba entrechocan. No hay reposo en los reflejos; la imagen de un ombligo remonta una cresta, y al menor requiebro del agua aparecen los muslos, que incitan la abulia de una ola que se resiste al nado. En la orilla los mosquitos se atragantan de luz y el cabello se abate con el limo.
De repente, la culebra gira virando las tonalidades del agua, en tonos que se desplazan desde un verde acedo, hasta un azul rutilante.
La refracción de los cuerpos se agranda y se encoge; se barrunta apenas el contorno de una espalda que navega en celo; un brazo que enreda la lisura de un vientre, y que al proyectarse en el agua empuja los límites del estanque.
La irremediable sombra de una nube se deja caer, mientras una onda arremete contra las piedras, formando una espuma blanquísima, que se confunde con la imagen de una lengua ensalivada.
De pronto los reflejos cesan… parece que la calma se entume junto a la culebra, pero sólo es el acicate de un reflejo viril, que aparece y desaparece en un salvajismo de agua dulce.
Emerge; respira… se sumerge en un movimiento tenaz, como aquél polvo que a lo lejos –por el camino que rodea al estanque- anuncia la llegada de un añoso carretón.
Confinado a una marcha torpe y a un perplejo porvenir, el carretón vapulea la distancia; parece inmóvil, hipnotizado por el calor. La madera y el metal se atolondran; crujen en una destemplada sequedad. Pero avanza… avanza al tumbo de una mula adormecida por el estrépito de las ruedas, que giran borrachas en un lujo inútil por mantener el paso.
Se acerca devorando kilómetros con una gula insípida, y aunque la mula se afana, el carretón parece suspendido en medio del polvo, como si esperara un cambio de naturaleza, y que en vez de rodar él, fuera el camino el que rodara.
Sin embargo, avanza… avanza tras el cadente paso de una pezuña, que percute como un puñetazo pulcro… solitario; en una marcha que se impulsa al roce de la rienda; impulso de una raza que nunca se revela a la voz del dueño, no importa que ese dueño viaje atento al rechinar de sus huesos. No hay paciencia que lo alcance, que le perturbe; el mira de frente al camino. No se preocupa, él lleva las riendas, el ritmo, su vejez.
El estanque esta cerca, se escucha un chapaleo en el agua. A una voz de rienda, carretón y mula se detienen. La espera es larga… sinuosa; él, con una crepitud enorme, apoya su pie descalzo en la rueda. Desciende lento… atávico; hasta sentir el calor de la tierra en sus plantas. Avanza hasta el estanque… Observa como la culebra retoza, y cómo el reflejo de dos cuerpos se clava en su pupila.
Un sudor áspero… tibio, le corre por el vientre. Se perturba, se confunde. ¿Cuál es la imagen verdadera? ¿el reflejo verde de los cuerpos en el agua o, los cuerpos mismos en la hierba?.
No hay asombro en sus dudas, él se aleja en su carretón, para dispersar con el polvo la memoria de una sensación tal vez glauca y mortecina.
Sergio Astorga.
jueves, 20 de noviembre de 2008
Hoy todas las voces
Nadie tiene que pegarte.
Los buenos mimos, los buenos abrazos, los buenos besos y las buenas caricias son muy lindos y siempre nos hacen sentir muy bien, nos hacen felices, nos ponen contentos.
Los malos mimos, los malos abrazos, los malos besos y las malas caricias son muy feos, nos hacen sentir muy mal, no nos hacen felices y nos ponen muy tristes.
Son distintos, unos buenos y otros malos.
Nadie puede hacerte mimos que te molesten, que te hagan sentir mal o que te pongan triste.
Seguramente quien te hace esos mimos malos te dijo que está jugando, que es un secreto, que no se lo cuentes a nadie.
Los secretos son siempre de cosas lindas, nunca de cosas feas.
Por ejemplo, guardamos en secreto el regalo que compramos o una linda sorpresa para alguien que queremos.
Por eso si alguien te dice que guardes un secreto de una cosa fea, no le hagas caso y contáselo a todo el mundo.
Si un amigo o una amiga te cuentan que les pasa algo parecido, que le pegan, o que alguien le hace caricias que le hacen mal y que eso es un secreto. Explicale que ese secreto le hace mal y que tiene que contarlo.
Como este es un secreto feo y sabemos que los secretos feos no se guardan, vos se lo contás enseguida a una persona grande en quien confíes para poder ayudar a tu amiga o a tu amigo para que no le siga pasando algo tan feo.
La persona que hace esos mimos malos, que te hacen sentir tan mal, dice muchas mentiras para que tengas miedo y vergüenza.
No le creas absolutamente nada de lo que te dice.
A lo mejor te dice que te quiere mucho. Esa persona, miente.
A lo mejor te dice que nadie te va a creer cuando lo cuentes. Miente.
A lo mejor te dice que si contás van a pasar cosas muy feas. Miente.
A lo mejor te dice que lo que pasa es tu culpa. Miente.
Si alguien te hace mimos malos, que te hacen sentir mal, nunca es tu culpa.
Nadie puede decirte que no cuentes lo que te pasa o lo que sentís.
Nadie te puede tocar, mimar, abrazar, besar o acariciar de un modo que no te guste o que te haga sentir mal y triste.
Tu cuerpo es tuyo solamente, respirá hondo y si podés, gritale bien pero bien fuerte NO a cualquiera que te haga sentir mal y salí corriendo y pedí ayuda a otra persona.
Decile bien fuerte: “No” me quiero quedar con vos.
Decile bien fuerte : “No” quiero estar con vos.
Del mismo modo que no está bien pegar o lastimar a otro tampoco está bien que alguien te toque de un modo que no te gusta o que te haga sentir mal.
Hay personas buenas y hay personas malas y quienes les hacen estas cosas a lxs chicxs son personas malas, muy malas.
Por suerte hay muchas personas buenas que te quieren, te cuidan y te ayudan.
Vos no tengas miedo ni vergüenza y contale a todo el mundo lo que te está pasando.
Decilo bien fuerte, porque lo que estás contando vos sabés que es verdad.
Afectuosamente,
Mónica L. Creus Ureta
miércoles, 19 de noviembre de 2008
Una voz para muchas voces
El abuso sexual es la forma más grave de maltrato de la que puede ser objeto una persona.
Nos faltan palabras para calificarlo cuando se trata de un niño o una niña o de un adolescente.
Cuando decimos abuso sexual infantil nos referimos a cualquier conducta con claro sentido sexual en la que haya contacto físico o sin él (tocar o ser tocado, por medio de palabras, exhibición de los órganos genitales y/o fotos o películas pornográficas) hacia un menor de alguien que detenta poder y/o autoridad ante ese menor, que lo hace su víctima y a partir de la cual el ofensor obtiene gratificación sexual.
Resulta muy importante comprender que no siempre se encuentra presente la violencia física para perpetrarlo, generalmente sólo es suficiente una relación de autoridad y/o de confianza entre el adulto y la víctima para que el abuso sexual ocurra.
Nuestra primera reacción frente al abuso sexual infantiles es la incredulidad, la duda.
No sólo nos resulta inadmisible, sino también impensable que alguien se excite, abuse, someta y amenace a un ser indefenso.
Para defendernos del dolor que nos ocasiona pensar en el abuso sexual infantil, individualmente y como sociedad, el mecanismo siguiente que se pone en juego es la negación: No, "esto" no puede ser verdad.
Lo primero que tenemos que hacer, es vencer nuestros prejuicios, esta resistencia individualmente y como sociedad para aceptar y reconocer que el abuso sexual infantil existe y es mucho más frecuente de lo que nos gustaría creer. Aceptar que ocurre en todos los niveles socio-económicos y culturales incluso en las "mejores" familias.
Pensamos que ocurre con más frecuencia en los niveles más pobres, menos educados, sin darnos cuenta de que estos sectores están más expuestos que los niveles medios y altos a la intervención de la comunidad y que esta es la razón por la se producen un mayor número de denuncias. (hospitales, colegios públicos).
Paradójicamente las mejores condiciones socio-económicas lejos de garantizar la integridad de los chicos, los deja aún más desamparados, más vulnerables, porque el abuso sexual infantil se silencia.
Al no haber intervención directa de la comunidad, la atención que reciben es "privada", donde los intereses económicos prevalecen y no se hacen "públicas" las cuestiones "privadas".
Por otra parte el imaginario social nos hace creer que estos monstruos abusadores se pueden claramente identificar, que se diferencian mucho de nosotros, son los desconocidos, los extraños, los degenerados, los enfermos, los criminales, ex presidiarios, los abiertamente violentos, porque nos resulta inaceptable que sean "gente como uno".
Lo cierto es que quienes son los abusadores están cerca, son siempre conocidos por nosotros y nuestros chicos, conviven con nosotros y/o con nuestros chicos y pueden ser tanto hombres como mujeres.
Enseñamos a nuestros chicos a cuidarse de los desconocidos, de los extraños.
Pero también les enseñamos a obedecer sin cuestionar y a ser cariñosos con los adultos de quienes dependen.
Facilitándoles de este modo el camino a los abusadores.
Lo primero que deberíamos enseñarles a nuestros hijos e hijas, es el respeto y la confianza en sí mismos, que su cuerpo es de ellos y a decir NO.
Fuente http://www.abusosexualinfantilno.org/base/
martes, 18 de noviembre de 2008
Una voz para muchas voces
lunes, 17 de noviembre de 2008
Una voz para muchas voces
Prevent Child Abuse AmericaPO Box 2866Chicago, IL 60690-9950
Publicado por Joan Montane
http://forogam.blogspot.com
viernes, 14 de noviembre de 2008
Luz de vida
Por estas tierras de New México este abarrote tuvo la oportunidad de visitar y conocer al fotógrafo Thomas Vorce, un hombre que literalmente se le va el aliento en cada fotografía, física y lumínicamente, por no decir espiritual.
Thomas Vorce nació en 1942 en Holywood, California, tiene una licenciatura del Western Michigan University, ha sido dos veces nominado para los premios Spider Awards (premio anual para la fotografía en blanco y negro) y un ojo múltiple perdido en su propia inmensidad.
Las tres fotografías que este abarrote seleccionó están tomadas en Taos y en Santa Fe que se encuentran a 70 millas la primera y a 30 millas la segunda de los Álamos.
futuro, sin arrugas, y también es sentir la humedad de los volúmenes y su soledad de forma delante del asombro. Todo es anónimo, el espectáculo, las formas, la belleza no cesa y en buena hora queda impresa para aclararnos otras realidades.
A veces una astilla de vida se nos clava en nuestros ojos, Thomas Vorce tiene enfisema pulmonar y conectado al oxígeno trabaja todo los días, sabe que puede morir hoy o mañana, viven en Santa Fe, en un conjunto habitacional donde tienen apoyo de enfermeras y todos los servicios. Es un departamento pequeño, confortable, luminoso.
Sí, en cada fotografía hay literalmente un soplo de belleza y de vida. Porque el claro-oscuro nos ilumina con su drama y nos perfora la consciencia. Porque así es el abarrote.
jueves, 13 de noviembre de 2008
La Mudanza
las uñas, los cabellos:
el limpio ámbito del sueño.
Es de la danza
el teatro, los luceros:
el silencio quebrado de los muertos.
Es de la casa
la raíz, la silla:
es el pan que se come la costumbre.
Es del camino
la duda, los espantos:
simulacro tenaz de los retornos.
No hay mejor tierra
que el viento, los delirios:
los siglos nocturnos que te nombran.
Todas las puertas
son espejos, son muros:
trampas de la flor y sus perfumes.
Robar la luz
del tiempo, las bodegas:
fábrica del giro de los días.
Dejar las alas,
las plumas en adioses:
lápida de la voz y de la sangre.
Todo es mudanza,
los murmullos, la piel,
siempre en la tarde que navega.
miércoles, 12 de noviembre de 2008
Una voz para muchas voces
martes, 11 de noviembre de 2008
La última y nos vamos
(dueña del abarrote)
en varias temperaturas
porque las ondas vibran
con impecable cordura.
Del hidrógeno al helio,
pasando por el bismuto
el cobre y el magnesio
complejos del absoluto.
Por mucha ciencia sabida
le reprochaban en casa,
que todo lo que pensaba
era pura “brincadeira”,
que lo suyo era pasar
a ferro y almidonar
en la ropa, y el fregar
la loza y alimentar
al becerro. En Oporto
quedaban supersticiones.
En los Álamos tenía
puras aceleraciones.
Dicen que por los neutrones
la catrina se coló
y con la termodinámica
sus días finiquitó.
Aquí yace Helena Braga.
Con su charro negro danza
la charanga que le agrada
con el tiempo de comparsa.
Sergio Astorga
viernes, 7 de noviembre de 2008
Calaveras del Abarrote V
Afianizado en el misterio
divagando solitario,
combinando los contrarios
del silencio es propietario.
Con las cartas a Miralles
llegaban a su ventana
comentarios a granel
que llenaban su semana.
“¿Porqué no escribes viajero
-le pregunta descarnada
la calavera tilica-
sobre el amor pasajero
del que ama y el amado?”
Dédalus meditó cuatro
semanas y media. Dolor
de cabeza y pecho
lo dejaron confinado
a vagar por los tejados
sin encontrar un alfeizar
donde quedar afianzado.
De Dublín a New York
pasando por toda España,
se cuenta que la huesuda
ya le enterró la guadaña.
Sergio Astorga
Se apareció el tigre
con panza, y el elefante
en medio de la casa.
La guacamaya cruzaba
la calle con cuidado,
y los niños en la escuela
cantaban a Walt Whitman
y aprendían a nadar.
En Manhatan o en Paseo
de la Reforma o en Sri
Lanka, el sol de madrugada
en ingles o en español.
Un día como cualquiera
vio bajar de la escalera
a una fina dama blanca
como si fuera un encanto.
Indran la miró con fuego.
Los gorilas se salieron
de sus jaulas y los rojos
se juntaron con los verdes.
Platican los entendidos
que lo de arriba es de abajo:
unos se van para el cielo
otros se van al carajo.
Sergio Astorga
Calaveras de José Guadalupe Posada.
jueves, 6 de noviembre de 2008
Calaveras del Abarrote IV
Soñaba con los azules
como si fueran recuerdos
y era el mar envuelto en tules
el que lloraba de celos.
De noche fue consentida
de las hojas de abedules.
De manzana su bebida
y como almohada, las nubes.
Dicen que fue por febrero
cuando le cambio la vida,
un encanto marinero
aceleró la partida.
Por las noches ella prosa
con la sonrisa a babor
y en la ola ella retoza,
tiene derecho de autor.
Vuelen gaviotas al puerto
y digan que Maribel
es la que ofrece el concierto
con notas de cascabel.
Sergio Astorga
Cuando de letras se trata
hay una voz lapidaria.
De sapiencia se retrata
la apostilla literaria.
Siempre con la puntería
de aligerar el encuentro
nos ahorra los disgustos
de divagar con un texto.
La catrina venenosa,
en ediciones de lujo,
le entregó escrito en prosa
“Los amores del cartujo”
La crítica recibida
no fue lo que ella esperaba
y acabó con la movida
con la certera daga.
Las azucenas del campo
amparan a la analista
ahora que Magda Díaz
en el cielo es jornalista.
Sergio Astorga
miércoles, 5 de noviembre de 2008
Calaveras del Abarrote III
Caminando por el aire
un globo hinchado de rojo
bailaba al son del jarabe.
Una muchacha de sal
gastaba su melodía
con notas del mineral
y risas de orfebrería.
Oteando por su ventana
con su semblante de cal
dicen que la vio llegar
en huesos y en delantal.
Que el mar se quedó sin alas
ya pregonan en Gijón,
y la escalera del cielo
se queda sin escalón.
Fátima Fernández baja
los peldaños de la infancia,
y los cuentos que contaba
Para Miriam Jade
Con metafísica diurna,
como cascada de dudas
desayunaba blandura
y quesadillas sesudas.
Difusa en sus claridades,
cometa de su mudanza,
dejaba las vanidades
en sus recuerdos de crianza.
Con presocrático rimel
incrédula de su reflejo
se apasionaba del gospel
y del concepto bermejo.
En su tesis doctoral
apareció la huesuda
“escándalo soy”- afirmas
y con un gesto floral
ni el desplegado con firmas
le devolvió su sayal.
Con escritura aleatoria
Miriam Jade confirma:
Que la salida es oscura
no importa filosofía,
estando en la sepultura
la molécula se enfría
Sergio Astorga
martes, 4 de noviembre de 2008
Calacas del Abarrote II
y las troyanas vencidas
despliegan su fino canto
con el sabor de amaranto.
Una Quimera detiene
los apetitos de Gea
y del muslo de Atenea
el ansia de Páris drena.
En esos mundos vagaba
cabellera vespertina.
Sus abismos habituales
con ecos de aguamarina.
Siempre con ojo travieso,
nunca esperó la traición
de la parca mexicana,
no le valió el palimpsesto
ni su fama ciudadana
ni su pluma de aluvión
ni su porte de sultana.
Del Atlántico al Egeo
la tristeza se une al viento.
Lilian ya vaga en espuma,
su esqueleto ya es un verso
donde encalla el desaliento.
Para Lauren Mendinueta
Su sonrisa colombina
como fulgor de guayaba
le granjeo la serpentina
que humedece la mañana.
Los verdes con los azules,
recuerdos de cafetales,
le dieron rostro a sus jueves
y cadencia a su donaires.
Cambiando de continente
quiso engañar a la dama
que se entiende con el alma.
No le valió ser prudente
porque al sonar de campanas
Lauren entró al inventario
de los laureles que llevan
aretes como poemario.
Sergio Astorga
lunes, 3 de noviembre de 2008
Calacas del Abarrote
En este abarrote seguimos una tradición festiva que ofrendamos a toda nuestra estimable clientela.
El culto a la muerte y a sus muertos se encuentra en el tuétano de las culturas prehispánicas (la edad de piedra me la salto para ir a la flor de pedernal) Con variantes, la concepción de los pueblos precolombinos, la muerte era una dualidad de la vitalidad. Las practicas y rituales que conformaron el culto a la muerte están presentes en los Teotihuacanos, toltecas, aztecas, zapotecas, mistecos, mayas, huastecos, totonacas, otomíes, purépechas y ya paro porque cambian de blog.
Los aztecas por ejemplo, tenían dos fechas para conmemorar a sus muertos, el mes de agosto se dedicaba a Miccailhuitonitli o muertecitos y en noviembre la fiesta de los muertos grandes. El más allá dependía de la forma de fallecer y no a la vida que habían llevado, no había castigo ni culpas. Por ejemplo, las mujeres que morían de parto se convertían en estrellas para acompañar a Quetazcoatl, eran consideradas guerreras muertas en batalla.
Después de la conquista, el Mictlán lugar a donde van los muertos se comparó con el infierno y a Micantecutli (señor de los muertos) se identificó con el diablo. El sincretismo comenzaba y enriquecía y transformaba y confundía conceptos. Se establece en México –Nueva España- el día de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos, que se solemnizaba desde los 827-844 por disposición del Papa Gregorio IV. La muerte comenzó a ser temida, apareció la culpa, la condenación, el Infierno y el Purgatorio. Fue hasta el siglo XVII cuando se trato de darle a la muerte un aspecto menos terrorífico. En este intercambio de vivos
el juego y la desgracia se ocultan en un abrazo. Una de estas tradiciones es comerse a la calaca ya en dulce ya en palabras. Las calaveritas son versos octosilábicos festivos, que ironizan o exaltan una cualidad, no son macabras y no son ofensivas, si criticas.
Este abarrote preocupado por alagar a su estimable clientela ofrece unas cuantas calaveras de rimas atemperadas y otras totalmente erradas. No se me ofendan, ni se me asusten, que si nombramos sacamos lo que nos duele y si reímos vivimos mas a las anchas. Poco a poco irán saliendo del horno, no se amontonen que a cada capillita le llega su fiestecita. A ver si por andar dando ofrendas se me chamuscan las orejas. Que le vamos hacer. Así es el abarrote.
Sergio Astorga.
Por Triana
Por el Guadiana llegó
una moza de tronío
dejando con señorío
un aroma que caló.
Las luces de Badajoz
vieron nacer su voz,
después el Guadalquivir
la quiso como al jazmín.
A la usanza sevillana
la catrina la llamó,
los duendes de los gitanos
no metieron ni las manos.
Van pasando con sus ramos
muchachas de la buhardilla,
dicen que la tutoría
se fue con su pantorrilla.
La huesuda nos advierte
cantando por bulerías,
que andaluza es la suerte
y no mester de clerecías.
Triana se guarda en su concha
y la perla que renace,
en México la celebran
con carnitas y tepache.
Sergio Astorga
Para Izaskun
Siempre con historias puestas
colgadas en los portales
pregonaba sus donaires
con letras existenciales.
De las canarias venían
las noches de letanía:
las aflicciones del tiempo
como si fueran de almendro.
La pelona con respeto
fascinada la escuchaba
-“cuánto sabe de la vida
me dan ganas de dejarla”.
No le valieron las súplicas
de sus alumnas amadas,
ni las noches literarias
en su memoria atrapadas.
Las flores de noche buena
guardan a Izaskun Legarza
la añoran las golondrinas
y las olas en su danza.
Sergio Astorga
Para Alejandro Gelaz
Por andar con las ficciones
se quedó con fijaciones,
ni los mántras, ni las runas
le acrecentaron fortunas.
Imágenes digitales
le ocuparon en la vida.
Llegaban sus arsenales
de Roma y Alejandría.
De todos los laberintos
de victoria se jactaba
no contaban sus instintos
con la astucia de la parca.
Noches de los calendarios
orfebres de los arcanos
falaz aforismo tuvo
al refutar el presagio.
Por andar en la maroma
y en romance con la nada
Alejandro Gelaz toma
minificción por morada.
Dicen que Micantecutli
para llevárselo a Heracles,
le entregó un acapatli
y ahora ya son compadres.
Sergio Astorga
domingo, 2 de noviembre de 2008
Calaca Bloguera
de cibernéticos cantos,
y un poco de alma se enturbia
con sentimientos binarios.
Las fronteras del espacio
en Google quedan marcadas.
La guadaña tiene su historia
en Wikipedia asentada.
Los huesos son su teclado
y un suspiro de futuro
en disco duro archivado.
Ya sin azul en los ojos
y la fatiga editada
no le valió ser bloguera
y se murió desdichada.
Vuela vuela palomita
y diles a los blogueros
que se anden con cuidado
que a la parca no le importa
el perfil bien redactado.
Aquí yacen sus despojos,
y por andar con Antojos,
se quedo muy quietecita
con el silencio en los ojos.
Sergio Astorga
sábado, 1 de noviembre de 2008
jueves, 30 de octubre de 2008
Soy Catrina
Mi carne es la tarima de noches frías de tabaco y de esos humos negros que te embriagan.
No tengo lagrimas, todas las dejo en el hotel y en el vidrio del brindis.
Me duelen más los tobillos que mi vientre porque está vació de tanto recebo, en cambio mis tobillos giran, se hinchan al ritmo del danzón y me duelen, me duelen mucho como el sueño.
Mis labios son rojos porque quiero y me visto de domingo para gastar las miradas de los jóvenes que pasan.
Soy generosa, voraz y cordial a la hora del hambre y me enamora que me digan bella.
Soy Catrina y por eso éste aire me devora.
Sergio Astorga