jueves, 31 de diciembre de 2015

Baja el 2016


El ángel de la altura llega y se lleva en la mano al viento del pasado para que no haga mella ni en los ojos ni en la frente. De un salto ha dejado la luz repentina de las ascuas. Lo que nadie ve nos mira. 
Pongamos nombre a los nuevos días aunque no podamos explicarlo.
A contraluz, ya nos sentimos victoriosos.
Buen año para todos y muchos labios para beber del cielo.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

Contraste


Lujosa la soberanía del contraste. La luz se sostiene en un cuerpo de sombras tan pesadas que la mitad del mundo se queda deambulando por el abismo. La otra parte se desvanece intangible como la nube. La mirada disfruta esa dualidad. Donde la realidad se mira gemela e inflexible. Una masa verdadera entre los planos. Luz y sombra, parlamento representado en cualquier ciudad en que vivimos perforados por su espacio.

Fotografía: Sé Catedral, Porto, Portugal

jueves, 24 de diciembre de 2015

Navidad 2015


Con la alegría y buena disposición de todo Abarrotero les deseo a todos los que se encuentren leyendo estas líneas y a todos los ausentes que quisieran y por diversos motivos vitales o fatales no lo pueden hacer, que tengan una suculenta cena que mitigue en lo que se pueda los malestares del ánimo y puedan reconciliar el tranquilo sueño del justo.

Mis mejores deseos siempre para su mesa y para su mente.
Sergio Astorga

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Libros sin segunda mano


Desde la primera linea se sabe si evadimos el prologo.

Fotografía: Livraria Poetria: Rua das Oliveiras, 70 r/c, loja 12

martes, 22 de diciembre de 2015

Formalidad


Canturreaba amorosamente, canciones de fiesta que comienzan con un ir y venir de sensaciones primarias pero tan pegajosas que las pobrezas que las constituyen, uno las deja pasar como un gran bulto que es necesario poner en la habitación de los trebejos. Sin darse cuenta fue llenando la casa de discos grabados con los más variados artistas del momento. Su mal gusto no tenía medida. Compraba camisas amarillas con imágenes de leones o coyotes con las fauces abiertas. Y esos zapatazos de tacones gruesos que por ventura eran negros y mitigaba un poco el estrafalario pantalón verde. Ejercía su oficio sin problemas. Con una pundonor que estremecía. ¿Quién es uno para decir lo que es vestir con elegancia?  Donde hay un suelo o un alma que come el pan tremendo del día a día, es difícil mover la navaja con soltura. Cada quién sus pobrezas, pero uno se siente en realidad indefenso, esto de la estética tiene muchos siglos, una armonía vamos, indispensable, elemental. No es que uno sufra, pero duele, chillan los ojos, la nariz respinga. Uno raspa los conceptos, las inscripciones áureas. Independientemente de uno, hay algo que resbala, que sosiega, digo, cuando se mira la perfección. 

- ¿Cómo me veo?
- Bien.
- ¿Te gusta mi nueva camisa? Es un coyote canadiense.
- Impresionante.
- Si quieres te regalo una; compre dos.
- Gracias. Gracias. Pero a mí me gustan las palomas.
- ¿De veras? Ahora que vea una. Te la compro.
- No te molestes ya tengo suficientes.
- Como quieras. Me voy que tengo que ir por un disco de los Tremendos, que está buenísimo. Para bailar con la Jimena.
- Sigue. Sigue. No te entretengo.

Cuando menos la palabra tienen una forma que puede vestir al ojo, para que la afrenta pierda la tonada. Uno mira de abajo para arriba y a veces uno no sabe si el herir está en el decir o en el callar. Pasan los años y sigo sin resolver esta cólera de los desiguales.

lunes, 21 de diciembre de 2015

Días de guardar


Para los días enmascarados
no hay como el árbol. 
Vestidura de un rostro. 
Un sello de fibra. 
La resina cubre
palabras distintas
al trueno y al granizo. 
Uno se inventa una cara, 
las arrugas del rostro
no tienen fin 
como la copa
de los árboles mentales.
Son demasiado reales
los latidos de la madera.
Lenguaje que se calcina 
fácilmente como las ramas secas. 
En los días enmascarados, 
la semana es circular 
y una masa borrosa
las horas. 
De aire y luz 
se va oscureciendo la madera.
Todo es elusivo 
como esta pausa que se incendia. 

Fotografía: Sala de Máscaras Africanas do Museu José de Guimarães, Guimarães, Portugal. 

sábado, 19 de diciembre de 2015

Posada en claro


Nada más extraño que la felicidad en todos esos rostros que llegaron a la posada. Bebieron agua de horchata; cantaron villancicos y rompieron la piñata.
En las noches de calor, cuando me duermo, una gotita de sudor me recuerda que no todo es lloroso en esta jaula.  

viernes, 18 de diciembre de 2015

Entre bocado y bocado


A la hora del almuerzo los invitados imprevistos llegan con todo y plumas. Por fortuna, la dieta de la herida es más ácida que la saliva. 
A veces, un duelo de paciencia y de reinos se vive en las urbes. 

Fotografía: Jardim de João Chagas (Jardim da Cordoaria)Porto, Portugal

jueves, 17 de diciembre de 2015

Acopio


Se derramó como vino oscuro
y un repentino frío 
crepitó, pegajoso, en los labios.
El talento de la lengua
encierra un delirante grillo,
como si el barullo fuera el hogar
de los sabores.
De todos modos, 
el festín es una marca,
audible apenas,
cuando chocan las memorias.

miércoles, 16 de diciembre de 2015

Vestigio


El mapa de su frente
tuvo el talento de la fiebre.
Delirante, 
manchó la tarde
con la tierra amarilla de sus dedos.
Como una postal,
llegó tarde.
Hendidura de aliento.
Sin pudor,
la estampilla
es un eco entre dientes de su infancia.

martes, 15 de diciembre de 2015

Estación Poesía 5


Amigos: “Es hielo abrasador, es fuego helado”, nos dice Quevedo y en esas ando. Pongo, delante de sus ojos el hoy para el olvido de mañana, el poema que se ha publicado en el número de otoño en la Revista Estación Poesía 5.
Mi gratitud a su director Antonio Rivero Taravillo así como a su editores este bien otorgado. 
A los lectores su paciente y lucido mirar, pido.

Atajo

Se ataja con la mano la desnudez.
La serpiente original se descarna
y tu y yo, a cara limpia,
perfilamos la luz de la lámpara. 

En punto muerto nos deslizamos; 
equidistantes los murmullos.
Los rincones extraviados.
ondulan, sueltan su máscara.

El aire devora la placidez.
La brújula busca la misma rosa,
y la mano, extraviada,
se planta en extraño hemisferio.

En el fondo siempre comenzamos,
rutinarios, ensimismados.
Con el mismo rapto furioso
cuando la noche acecha de tan parda.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Los erguidos


Aquí, 
en lo más verde 
el tatuaje de sudor:
saliva fugitiva
del riñón inflamado.
Aquí, 
en medio de la luz neón:
el prolongado silencio tiene alba.
Cruzan las calles.
Ellos saben de la metralla 
y del rumor del miedo.
Son escombro de raíz
y mueca de guitarra.
Con la cabeza erguida,
llevan un sapiens  
como flor en la solapa.

sábado, 12 de diciembre de 2015

Parade


Los soldaditos de carne y hueso uno a uno fueron cayendo en la gran caldera del anonimato.
La marcha triunfal da testimonio.

Fotografía: detalle del monumento a D. Pedro IV, Praça da Libertade, Porto, Portugal.

viernes, 11 de diciembre de 2015

Celebración


Había nombres atados con hilo de ceniza.
Olores matinales.
Y una repetición de humo.
Con el calor,
las moscas
se pegaban al círculo,
al mismo ritual del sacrificio.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Del equilibrio


Lo más sorprendente era verla llevar cinco platos y tres vasos tambaleantes en los dos brazos. Usaba una charola pequeña, que no era lo normal en estos casos. De niña lo hacia con las muñecas y los peluches de su hermano. Todos pensaron que esos prodigios merecían mejor suerte. Asediada, comenzó a engreírse, hasta que no tuvo más remedio que entrar a la cadena de restaurantes para ganar mil quinientos al mes, más una comisión por si vendía dos mil pesos diarios. Se le veía ir y venir, confiada en su facilidad para mantener el equilibrio. Alguna vez tuve ocasión de mirarle a los ojos, así, muy de cerca, su mirada serena, como de abeja concentrada en el panal, le daba la seguridad del movimiento. Nunca la vi caer, ella balanceaba las caderas con un meneo entallado como si no supiera que llamaba la atención. Se llamaba Elizabeth. 
Un día al despertar, un hombre le susurró con fuerza en el oído, y sin abrir los ojos, Elizabeth, nunca más halló el equilibrio.

martes, 8 de diciembre de 2015

Casa del pescadpr


Encontrar pescado no es fácil. Zarpar de madrugada a lo indefinido. El aire es pesado como la mañana. La vida marina no aparece. Hay una tenue brisa y pareare que la buena ventura baja como marea.  A lo lejos veo llegar la barca de los pescadores. EL misterio en su mirada se sospecha. La soledad de agua es absoluta. Una súbita angustia me invade y me envuelve como esta neblina espesa como el futuro humor. Al llegar al puerto veo vacías las redes y las cubetas secas. Los pescadores encallados en su silencio derrotado, caminan rumbo a la posada para beber vino y pan. La casa del pescador los refugia y los sacia de las pérdidas marítimas. La seducción del mar queda adormecida, se llenan las copas de vino y la extensión mas humana se deja sentir en las bocas, bahías tranquilas que degluten el pan preparando el cordaje del mañana, para que literalmente, la quilla de su embarcación se lance de nueva cuenta a buscar ese escurridizo pez que los mantiene a bordo de esta rutina marítima.

Fotografía: Rua Vasco da Gama, 18 | Afurada, Vila Nova de Gaia 4400, Portugal

lunes, 7 de diciembre de 2015

El gallo y la jarra


Coqueto hasta su última pluma se encrespaba por cualquier motivo, ya porque el gallinero no estuviese lo suficientemente aireado o las semillas estuvieran regadas por todo el piso. Sin embargo, no era motivo para enfriar esos ojitos soñadores  que iluminaban el amanecer gallináceo hasta el delirio. Su canto alumbraba, no cabía duda. 
Su rutina cantadora parecía no dejar espacio para la contrariedad hasta que una jarra pizpireta atrajo las miradas del vecindario.

- Dame de tu agua - reclamó el gallo.
- Con esas maneras ni lo pienses - respondió la jarra alargando su cuello.
- Aquí el que indica las maneras soy yo. Que por eso me llaman el gallo de la pasión.
- Pues agua no te daré - sentenció la jarra.

Alborotado el gallinero, se llenaba el buche de piedritas. Esas puntadas de faisán les causaban sorpresa. Porque hubo un tiempo, cuando los faisanes dominaban el mundo conocido, el gusto lo marcaba la faisanada.
La lucha duró varios meses; ni el gallo ni la jarra concedieron un poco en su arrogancia. El día comenzó a retardarse porque el gallo dejó de cantar y las lenguas comenzaron a secarse a falta de agua. Se formó una comisión con las gallinas más expertas en interpretar el lenguaje no verbal.
Con explosivas refutaciones se llegó a la conclusión de darles un día conmemorativo para cada uno. Así, en los primeros días de diciembre se celebra la fiesta del gallo y en los primeros días de enero la jarra celebra su fiesta.

- Mi fiesta el la mejor - presumía el gallo. Festeja el final de un año emplumado.
- Mientes, la mía es la mejor, celebra el inicio de la esperanza y todos saben que la esperanza tiene sed - jactanciosa la jarra se mojaba los labios.

Se volvió a reunir una comisión, ahora experta en efemérides. Como había pocas expertas gallinas en la comunidad, se abrió una convocatoria internacional que recibirá registros hasta el 2 de febrero, día de la Candelaria. Si usted esta interesado puede registrarse en el kilómetro 17 de la carretera IC 45. Favor de llevar agua suficiente. No se aceptan radios ni iPods.

domingo, 6 de diciembre de 2015

También en domingo


No es lo que sabes. 
Ni la reunión
del cuerpo con el fuego. 
Es esa presencia que construyo 
antes de que el sueño 
caliente las ojeras. 
Es, cómo decirlo,
la costumbre de recrear 
tu voz en pensamiento.
¿Te parece poco?

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Calendario 2016: Un acuerdo en La


Como todos los años, por estas fechas, El Abarrote se complace en presentar el Calendario 2016 dedicado como ustedes pueden apreciar, a la música. Impreso a color en papel de 160 gramos, libre de ácidos, en tamaño carta o A4 como gusten denominar el formato. Consta de una portada y doce hojas con el respectivo numeral mensual. Lo tenemos en español y portugués.
Usted puede colgar (pendurar) todo o cada hoja del calendario según su gusto.
Si usted esta interesado puede enviarme un mensaje y con gusto le enviaremos su Calendario 2016 “Un acuerdo en La” a la comodidad de su hogar. El precio es el mismo del año pasado.
No se demore con la canasta de los cacahuates, que todos queremos romper la piñata, así que antes de tan festiva ación, lleve “Un Acuerdo en La”
Uno por uno. No se me amontonen.
Recuerden: no tenemos sucursales. Atención personalizada por nuestro gerente de ventas, el afamado Sr. Rubalcaba.

Por su atención.
Futuras gracias.  

martes, 1 de diciembre de 2015

Diciembre


De qué esta hecho el diciembre sino de uva y castaña con su ancha anca de memorias. Es morena la pureza y atroz el sudoroso talle del olvido. Celebremos como si fuéramos invitados a esa ecuación de la copa y de la daga. Que todo vuelva a ser azul para que el jade verde sea profeta de la madre tierra.
Acabemos bien el año que el cansancio es para enero.