Su, es voluminosa, voluptuosa y vulnerable. Nacida de amores profanos, creció con la certidumbre de las raíces que se expande independientes al genero de tierra que les toca fecundar. Su piel fina envolvía sus monumentales muslos. Su talle fino y fuerte como el olor del mezcal inundaba el departamento de dos habitaciones amuebladas con un gusto concupiscente. Sillas de ratán y mesa de cedro. Imágenes del tarot enmarcadas en molduras de aluminio. Y unas copas de cristal rojo que se exhiben en un armario modular regalo de su madre.
Acosada desde la adolescencia comenzó a presentir el futuro. El futuro, dice, es como una especie de musgo se se me fue untando a la piel.
Vulnerable a la conversación. Platicaba con todos, los enloquecía para dejarlos con la boca y los sentidos abiertos.
Un día, Ivan, amigo de infancia, quizo aprovechar esa cercanía y puso la mano en el húmedo muslo. Su, de inmediato se alejó y dijo con entrañable voz:
- Ni lo piensas Ivan. Seré tocada sólo por el hombre que yo odie.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario