lunes, 5 de marzo de 2012

Era de goma




A toda luz la silueta incauta y realmente  pulcra de Don Sebastián Brandón se pasea tozuda en la memoria de sus súbditos. Súbditos que no se acostumbraron a esas antiguas maneras democráticas venidas de una península lejana. Ellos, los súbditos, gustaban de obedecer y Don Sebastián, magnánimo, no cejó en su afán de darles gloria, estabilidad y progreso. Su reino, que no tuvo fronteras, se perpetuaba con esa tranquilad de los santuarios.      

Un día, rugoso el cielo como un cacahuate, la silueta de Sebastián Brandón, traicionando su compostura, comenzó a disolverse. Se prendieron los mecheros del miedo y lo súbditos salieron a la calle por primera vez en sus vidas a manifestar sus opiniones.

Los súbditos ayunaron por varios días, hasta que resolvieron reconstruir la silueta de Sebastián Brandón, que se había convertido en una sustancia pegajosa.

La reconstrucción no ha terminado, por eso algunos avispados lectores le llaman la Era de goma.

Sergio Astorga.
Acuarela/papel 20 x 30 cm.

4 comentarios:

Freia dijo...

Inquietante micro y hermosísima su acuarela...
¡Adoro sus amarillos! Tal vez porque su luminosidad me recuerda casi siempre los acordes tribales, impetuosos de Stravinsky.

Un abrazo modoso

Sergio Astorga dijo...

Freia, lo amarillos también son de la melancolía. Son furiosa vocación solar. Y el timbal del grito vivo.

De tantos amarillos ya no sé dónde he dejado al sepia.

Hay un rey que muere todos lo días, no este, Sebastián, sino el otro, el que se esconde debajo de la colcha.

Voy a poner a remojar los violetas para que nazca la sirena y perderme con su canto.

Gracias por su fuerza, que la siento muy en Fa.

¿Era de goma o era de barro?

Abrazo totémico.
Sergio Astorga

Olga Bernad dijo...

Comparto con Freia el gusto por tus amarillos (sobre todo en contraste con los azules que, en esta era de goma, se han vuelto algo grises).

Brillante acuarela, a pesar de todo...

Abrazos firmes.

Sergio Astorga dijo...

Olga, que por estar pendiente de tu entrevista en la radio, que se me ha olvidad decirte que “amarillo sol poniente en medio del infinito campo de castilla” desde que me aprendí este verso de Juan Ramón los amarillos avivan mi nostalgia.

Albarazo amarillo ocre.
Sergio Astorga
*disculpa el atraso