domingo, 29 de noviembre de 2015

A lo hecho techo


Como mariposa de fierro
el techo respira luz,
Para el letargo
no hay reflejo.
Para la voz 
el hueco del sonido.
Uno quiere quedarse a vivir 
entre los fierros.
Y soportar todo el peso 
con los hombros.
Al fin de cuentas
uno siempre busca amparo
cuando tiene domingo la mañana.

Fotografía: techo en el andén de la estación de São Bento, Porto Portugal

2 comentarios:

Myriam B. Mahiques dijo...

Me encanta la conjunción de la literatura con la arquitectura. Muy bien expresado!

Sergio Astorga dijo...

Construir en el espacio es tan atractivo que parece que tocamos esta tercera dimensión que el papel no posee.

Abrazos cimentados.

Gracia por venir a los Antojos.